La agencia de calificación de riesgo Fitch rebajó ayer un peldaño la calificación crediticia de la deuda a largo plazo de la Comunitat Valenciana, desde "A+" hasta "A", y la mantiene en perspectiva negativa, por lo que podría volver a recortar su nota en los próximos meses.

Fitch explica que la rebaja, que sitúa el "rating" de la Comunitat Valenciana en la sexta posición, equivalente a la categoría media-alta de la escala, en la que están las regiones sujetas a un riesgo crediticio bajo.

La agencia de medición explicó que la rebaja, dada a conocer ayer mediante un comunicado, refleja el impacto en las cuentas de la autonomía valenciana de la desaceleración de la economía española, que supone un deterioro fuerte de su ejecución presupuestaria y un incremento sustancial de su deuda.

Fitch justifica que mantiene a la Comunidad Valenciana en perspectiva negativa por su preocupación sobre la recuperación de la economía nacional, lo que podría conducir a un crecimiento lento de los ingresos.

Este crecimiento débil, unido a las dificultades de la Generalitat para reducir sus gastos, podría perjudicar su ejecución presupuestaria hasta 2012 e impedirle alcanzar sus objetivos de consolidación fiscal, explicó la agencia de medición de riesgo en su escrito.

Por eso, advierte de que seguirá de cerca la evolución de la deuda regional, ya que podría tener que volver a recortar su solvencia.

Según estimaciones de la agencia de medición, la deuda directa de la Comunitat Valenciana podría aumentar en 5.200 millones de euros en el trienio 2010-2012 hasta llegar a 14.300 millones al final de ese periodo.

Esa cifra representaría el 108% de los ingresos corrientes frente a la proporción del 71,4% que tenía en 2009.

Ante esto, la agencia de calificación cree que la Comunidad Valenciana tendría que acudir a los mercados con nuevas emisiones para cubrir sus necesidades de refinanciación de deuda.

Fitch se centra además en el desempleo y destaca que la tasa de paro de la Comunitat Valenciana fue del 23,8% en el segundo trimestre del año, superior a la media del país, después de ver aumentar un 18,3% su población entre 2000 y 2009.