Insólita medida la de la Conselleria de Sanidad al decidir aplicar un ahorro retroactivo de hasta un 40% en los presupuestos del Centro de Investigación Príncipe Felipe de Valencia del pasado año 2009, es decir cuando el dinero está ya más que gastado y consumido. Ésta ha sido la razón con la que se ha justificado el reciente despido de otros dos trabajadores.
El esfuerzo que se pide a los más de trescientos investigadores del centro es más que titánico ya que al recorte del 33% que el patronato aprobó en los presupuestos de este año, que se ha traducido en dos millones menos de euros de un presupuesto total entorno a los nueve millones, se suma ahora el recorte de hasta cuatro millones que se va a aplicar en un dinero que se gastó el año pasado pero que se rascará del ya exiguo presupuesto actual.
En total, los equipos de investigación del Centro de Investigación Príncipe Felipe (CIPF) tendrán que dejar de gastar este año hasta 6 millones de euros, lo que merma el presupuesto hasta cifras prácticamente inviables de funcionamiento. Fuentes próximas al Comité de Empresa confirmaron que la conselleria ha aplicado una minoración de presupuesto del 40% en 2009, "lo que ya esta gastado ahora resulta que se debe", informaron las mismas fuentes que ratificaron que el único motivo de los últimos despidos ha sido meramente económico.
"En el centro todos están temblando, porque en cualquier momento le puede tocar a cualquiera", agregaron las mismas fuentes que observaron que ese 40% de ahorro se ha computado como "deuda" de 2009.
El CIPF obtiene su financiación de las aportaciones de Conselleria de Sanidad, Ministerio de Ciencia e Innovación, entidades privadas y convocatorias de ayudas nacionales e internacionales para los proyectos de investigación que realizan. Por otra parte, la Conselleria de Sanidad explicó que las aportaciones económicas que recibe el centro se han visto "disminuidas", lo que se ha traducido en la puesta en marcha de una política de control de gasto y de reducción de costes "con el objetivo de equilibrar las cuentas del centro".
Fuentes oficiales indicaron que el centro tendrá que reducir la dotación asignada el año pasado en 2.183.000 euros y la de 2010 en una cantidad estimada en 1.970.000 euros.
Protestas sin efectos
El pasado ocho de abril unos 160 trabajadores del Centro de Investigación Príncipe Felipe (CIPF) -casi todos ellos investigadores, de los 200 que forman toda la plantilla- protestaron a las puertas de la conselleria de Sanidad por la "política de despidos improcedentes" aplicada por la dirección científica del centro.
En esa ocasión los científicos ya denunciaron en su protesta que se el Consell se gastara el dinero de los fondos públicos, en teoría destinados para investigar -entre otras cosas- para pagar cuantiosos despidos improcedentes como los que se han producido en los últimos años.
El Consell y el CIPF firman un acuerdo para favorecer la generación de nuevos proyectos
La Fundación para la Investigación Sanitaria y Biomédica de la Comunitat Valenciana (Fisabio), impulsada por la Conselleria de Sanidad, y el Centro de Investigación Príncipe Felipe (CIPF) firmaron ayer un acuerdo de colaboración para favorecer "la generación de proyectos de investigación aplicada".Fuentes de la Conselleria de Sanidad explicaron que el objetivo del proyecto es "desarrollar propuestas concretas de proyectos de investigación traslacional entre investigadores del CIPF e investigadores del Sistema Valenciano de Salud". La investigación traslacional consiste en hacer llegar de la manera más rápida al enfermo los avances del laboratorio conseguidos a través de la investigación básica y clínica.Fisabio aporta la cantidad de 36.465 euros para la contratación por parte del CIPF "de un técnico de la Oficina de Transferencia de Resultados de la Investigación (OTRI) asignado a este proyecto", que centrará su función "en dicha transferencia de resultados". Por su parte, el CIPF "pone a disposición la información sobre sus investigadores y proyectos de investigación que sea necesaria para la cumplir los objetivos del proyecto", puntualizaron.La financiación del proyecto se enmarca en el convenio de colaboración fde la Conselleria de Sanidad y Farmaindustria "para el desarrollo del Programa +ICV de cooperación en investigación clínica y traslacional", cuya entidad gestora es Fisabio.
