La marcha de María Teresa Fernández de la Vega, cabeza de cartel por Valencia en 2008, conlleva que dos años y medio después de iniciarse la legislatura los números «uno» de las tres circunscripciones provinciales en los últimos comicios han dejado la primera línea política. El primero en renunciar al acta en el Congreso fue el candidato por Castelló Jordi Sevilla. Éste había sido relevado por Zapatero como ministro de Economía en 2007 pero, tras su intento frustrado de asalto a la secretaría general del PSPV dirigida entonces por Joan Ignasi Pla, le confió el liderazgo de la lista de Castelló para las generales de marzo de 2008. Finalmente, en septiembre de 2009 abandonó su acta en el Congreso para fichar por Pricewaterhouse.

En cuanto a Bernat Soria, partió la legislatura como ministro de Sanidad —entró en el Gobierno en la misma remodelación de 2007 en la que salió Sevilla—, pero cayó en la crisis de abril de 2009. En octubre de 2009 dejó el acta para reincorporarse al Centro Andaluz de Biología Molecular y Medicina Regenerativa que dirigía antes de ser ministro. Ahora, De la Vega, cabeza de lista por Valencia y baluarte de Zapatero desde 2004, abandona la primera línea para irse al Consejo de Estado. Como la número dos, Inmaculada Rodríguez Piñero, también renunció para ocupar la secretaría general de Infraestructuras, el primer diputado de aquella candidata es el que iba de «tres», Joan Calabuig, ganador de las primarias del PSPV para Valencia.

Camps pide elecciones

El presidente de la Generalitat, Francisco Camps, siguió el guión de Rajoy y manifestó que Zapatero «debería haber convocado elecciones generales anticipadas porque no tiene nada que ofrecer a los españoles» y que, más que un cambio de Gobierno, «España necesita un cambio de partido al frente del Gobierno». Por contra, el delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Ricardo Peralta, defendió que la remodelación «permitirá afrontar mejor la recuperación económica que se producirá en los próximos meses».

El líder de los socialistas valencianos, Jorge Alarte, felicitó a Leire Pajín por su nombramiento como ministra de Sanidad y a la ex vicepresidenta De la Vega, por su «encomiable» labor en los últimos seis años. Alarte subrayó «la dedicación y el trabajo» de Pajín, mientras destacó que De la Vega «pasará a la historia por haber sido la primera vicepresidenta del Gobierno en democracia».

El número «dos» del PPCV, Antonio Clemente, dijo que el cambio de Pajín «evidencia que no lo ha hecho muy bien» como secretaria de organización del PSOE, y puso como ejemplo su «responsabilidad en el caso de transfuguismo de Benidorm». La marcha de los tres cabezas de lista de la Comunitat es «prueba evidente del fracaso de los socialistas valencianos y de su pérdida de peso dentro del PSOE». El portavoz del PSPV en las Corts, Ángel Luna, dijo sentir «envidia» de que en España Zapatero tome la iniciativa mientras Camps es «incapaz de hacer algo» ante la crisis.