Los 17 cuerpos exhumados de las dos primeras fosas comunes del franquismo que se excavan en la Comunitat Valenciana han sido identificados por completo por el equipo de arqueólogos y forenses del grupo Paleolab que dirige Manuel Polo. Estas 17 víctimas desenterradas de los cementerios de Benagéber y Albalat dels Tarongers murieron en sendas operaciones de castigo de la Guardia Civil contra la guerrilla en 1947.

Las asociaciones que han ayudado a las familias, La Gavilla Verde y el Grup per la Memòria Històrica de la Fundació Societat i Progrés, así como el forense que ha dirigido las exhumaciones, Manuel Polo, presentarán el informe arqueológico y forense de la intervención el próximo lunes a las 19.30 horas en el Aula Magna de la Universitat de València.

Un documento que, según Matías Alonso, del Grup per la Memòria, es demoledor "porque prueba que estas personas fueron asesinadas con un inmenso sadismo". "Ante este informe va a ser difícil que haya algún juez que diga que en ambos casos no hay un delito", criticó Alonso, que lamentó que los juzgados de Llíria y Sagunt "se han inhibido hasta en dos ocasiones tras el hallazgo de los cuerpos".

Un esqueleto tiene hasta 30 tiros

Miguel Garrido, que tenía cuatro años cuando mataron a su padre en Benagéber, avanzó que el informe forense desvela que los 17 cráneos "tienen orificios de tiros de gracia", lo cual desmiente la historia oficial sobre la muerte de estos represaliados, que dice que a todos se les aplicó la Ley de Fugas y fueron abatidos cuando trataban de huir.

Explica que se ha podido detectar en muchos de los restos señales "de tiros hechos a bocajarro con pistola en piernas y brazos, cuyo fin era provocar una muerte lenta". "En uno de los ocho de Benagéber se han podido hallar hasta 30 disparos, lo que indica que fue un asesinato brutal", añadió.

Garrido agradece a La Gavilla, al Grup per la Memòria, y a Paleolab que hayan ayudado a las familias a "cerrar esta herida", mientras critica que "la gente que está en el poder en la C. Valenciana no nos ha hecho ningún favor a las víctimas".

Respecto a los restos del guerrillero Manuel Torres, El Practicante, cuya familia se ha opuesto a que se excavara la fosa de Benagéber, Alonso añade que se hará "lo que digan sus familiares". Así, El Practicante, junto otras cinco víctimas que las familias desean que permanezcan en el mismo lugar o no se ha podido localizar a sus descendientes, serán reinhumados en cajas individuales. En Albalat, donde los restos yacían en una fosa sin señalizar, "se ha comprado un nicho para depositar en cajas los seis restos que nadie ha reclamado por si en un futuro aparecen sus familias".

La entrega de restos a las familias será el 20-N

Los restos debidamente identificados se devolverán a los familiares que los reclaman para que les den un entierro digno. La entrega se hará en sendas ceremonias que se celebrarán el 20 de noviembre en Benagéber, acto al que asistirá el ex fiscal general del Estado Carlos Jiménez Villarejo, y el día 27 en Albalat. Sobre la coincidencia del primera de las restituciones con el 35 aniversario de la muerte de Franco, Alonso asegura "que no tiene ninguna connotación política, sino que se ha elegido este día porque es el que pueden acudir todas las familias, pues algunas de ellas residen en Barcelona y Teruel"