Tres sentidos tiene especialmente desarrollados este catedrático de Patología Médica a quien, además de médico, le hubiera gustado ser músico y arquitecto: el sentido del devenir, el sentido común y el sentido del humor. A su pericia de visión de futuro se debe la gran calidad del sistema sanitario público español. Ha participado en Valencia en unas jornadas sobre Investigación Biomédica con una ponencia en la que se anticipa a lo venidero.

¿Cual es el futuro de la Medicina?

El enorme adelanto de la medicina científica que se está acelerando cada vez más y más deprisa con dos avances tremendamente importantes: las Neurociencias, el estudio del cerebro que se inició en la última década del S. XX, y la Medicina Genómica, la biomedicina molecular que es otro de los grandes retos. La medicina va hacia ahí. Otro de los aspectos nuevos es la medicina predictiva, basada en la genómica que, a través del estudio de los genes, puede predecir que enfermedades va a desarrollar una persona.

Usted que impulsó el concepto de gran hospital ahora ya no es partidario de estas moles, ¿qué opina de la nueva Fe?

Es una pregunta con una contestación arriesgada porque puede parecer que estoy en contra cuando he sido uno de los médicos de España que más ha promovido la idea del hospital. Yo transformé lo que eran las residencias del seguro en hospitales universitarios. Una de las grandes revoluciones tecnológicas de la medicina son los nuevos métodos de diagnóstico como el TAC, el PET, la Resonancia, lo que yo llamo la exteriorización de lo interno que antes los médicos internistas teníamos que averiguar mediante la palpación abdominal. Hoy día no hace falta. Antes cuando se veía a un enfermo y no se sabía lo que tenía se le mandaba al hospital para que le hicieran una radiografía, un análisis de sangre..., ahora no hace falta, todo se resuelve en el centro de salud.

¿Cual es el futuro del hospital?

Puede volver a ser una residencia para el viejecito con muy poca dotación médica o puede ser un hospital monográfico donde haya grandes equipos de investigación.

¿Es partidario de los hospitales de mil camas o prefiere los mas pequeños?

No hacen falta hospitales de mil camas, ahora los hospitales tienen que ser apéndices de los centros de salud. Hoy día, la medicina científica, la que vale, no solo la que se refiere al diagnóstico sino a la cooperación entre distintos especialistas, tiene que hacerse en el centro de salud que es a donde van el médico de cabecera y los especialistas.

¿Ha cambiado mucho el perfil del médico español en los últimos 70 años?

Sí, en varios aspectos. El médico español hoy día es el mejor de Europa.

¿Así de claro?

Absolutamente, sin la más pequeña duda. Y no lo digo yo, un ex ministro de sanidad, José Antonio Griñán, un día nos reunió a varios directores de hospitales (yo estaba en Puerta de Hierro) y dijo: 'Vengo de Europa donde han estado reunidos varios ministros de salud y todos se han admirado de cómo tenemos la sanidad en España, pero hay dos cosas que nos envidian especialmente: la Organización Nacional de Trasplantes y la formación MIR que es un gran acierto'. El médico que sale de la facultad no sirve para ejercer la medicina, solo sirve para seguir estudiando la especialización con el sistema MIR.

Hoy faltan médicos

Hay un fenómeno muy curioso. En 1978 había en España cerca de 20.000 médicos en paro, hoy faltan. Al examen MIR del año pasado, de 6.000 plazas que se convocaron solo se presentaron 4.500, hay escasez ya de médicos en España y antes había un exceso.

¿A qué lo atribuye?

Los médicos estaban y están mal pagados, porque es una carrera que exige seis años de facultad y cinco de especialización, y eso es mucho tiempo y además se suma la exigencia de trabajar como especialista en un hospital grande y estar muy mal pagado. Eso hizo que fuera disminuyendo. Ahora nos encontramos con un fenómeno extraordinariamente inquietante: la importación de médicos extranjeros, rumanos sobre todo, que no han hecho el MIR y eso es un extraordinario peligro.

¿Está en contra de la importación de médicos?

Claro que sí, naturalmente. Estoy a favor de que al médico se le pague debidamente, mucho mejor de que lo que se le paga ahora, y de que se le de más facilidades en su empleo. La carrera del médico tiene que ser preferente, una carrera excelente.