La temperatura se disparó ayer en Valencia de forma inesperada hasta los 25 grados y estuvo a punto de superarse un registro récord que data de 1978, cuando la máxima alcanzada en el mes de la Navidad fue de 25,2 grados.

El calor fue también anticipo de un fenómeno poco habitual en diciembre: las tormentas que afectaron al interior de la provincia de Valencia y que dejaron pequeñas cantidades de precipitación, además de algunos rayos y truenos que ya hicieron acto de presencia la noche del martes.

Según los registros de temperatura en la ciudad de Valencia accesibles desde hace unos días en el portal de internet de la Agencia Estatal de Meteorología, desde al menos el año de 1938 no se alcanzaba en diciembre una temperatura tan alta a excepción de 1978, cuando la anomalía- 25,2 grados de máxima- se produjo el día 10. En 1954 y 1987 el termómetro superó los 24 grados aunque no llegó al registro de ayer.

Mientras, en Oliva se alcanzaban los 26º, y Alicante y Rojales llegaban a los 25º de Valencia, según Aemet. Vinaròs, Polinyà y Xávea (24º); y Castelló, con 23º, registraron también temperaturas altas para la época.

El viento hoy soplará de levante a partir de la tarde, lo que facilitará un descenso de ligero a moderado de las temperaturas máximas que solo en el sur de la Comunitat Valenciana se situarán en valores similares a los de hoy.

Por lo que respecta a las precipitaciones, las comarcas del interior de Valencia están siendo afectadas desde hace varios días de forma tangencial por los frentes que están barriendo el valle del Guadalquivir y la Mancha. En el área de Requena-Utiel se han recogido unos 30 litros en las últimas horas.

Ayer las tormentas que entraron desde Albacete apenas dejaron un par de litros en Caudete de las Fuentes y Requena.

No se espera sin embargo que las precipitaciones alcancen el litoral valenciano en las próximas horas, aunque no se descarta que el viernes se produzcan algunas precipitaciones débiles y dispersas. En general, el tiempo se mantendrá estable de cara al fin de semana aunque a partir del 15 de diciembre se esperan algunos cambios que podrían provocar una nueva entrada de frío e incluso de nieve, aunque todavía es muy pronto y solo es una posibilidad que apuntan algunos modelos.