La llegada de la conocida como "avispa asiática" al norte de España desata la alarma del sector agrícola. La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-Asaja) advierte que si esta avispa alcanza la Comunitat Valenciana provocaría la progresiva destrucción de decenas de miles de colmenas.
Todas las avispas suelen matar abejas, pero la voracidad con la que actúa esta especie asiática, la Vespa velutina nigritorax, es de mayor impacto. El principal alimento de esta avispa es la abeja, a las que corta la cabeza y después las devora. Según National Geographic, en un hora el ataque de 10 de estos insectos puede acabar con 10.000 abejas. De momento, en la C. Valenciana "es sólo una amenaza cierta pero conviene estar preparados porque, como con casi todas las especies invasoras, la detección precoz será clave para aplicar medidas con las que frenar su expansión", afirma el presidente de AVA-Asaja, Cristóbal Aguado.
Además, la organización agraria destaca que en caso de que la "avispa asiática" llegue a la Comunitat Valenciana afectaría al sector hortofrutícola. La eliminación de un elevado número de abejas reduciría de forma drástica la polinización y perjudicaría a la agricultura valenciana.
Aunque de momento, esta avispa sólo se ha localizado en el País Vasco, la alarma entre los agricultores valencianos ha saltado pues se conoce que el insecto puede aclimatarse perfectamente al clima mediterráneo.
A finales del año pasado, se confirmó la presencia de la "avispa asiática" en Guipúzcoa y es posible que se expanda por el resto de la cornisa cantábrica. Procedente del sur de Francia, donde ya lleva más de cinco años devorando las colonias de abejas, los daños que puede causar este insecto a la producción de miel son bastante relevantes.
Este insecto mide alrededor de tres centímetros, más del triple que la abeja europea, y sus nidos pueden alcanzar un diámetro de hasta medio metro. El hábitat natural de esta avispa invasora está localizada en China, el norte de la India y las montañas de Indonesia. Su principal diferencia con respecto a la avispa autóctona, la Vespa cabro, es su aspecto físico: abdomen oscuro, cabeza negra con frente amarillenta y los extremos de las patas también amarillos.
A finales del 2005 fue descubierta la "avispa asiática" en el suroeste de Francia en la región francesa de Aquitania. Se cree que llegó vía puerto de Burdeos, dentro de un contenedor de caquis. Hoy día, se ha extendido por más de 30 departamentos del país vecino y "su erradicación se considera impensable", según AVA-Asaja.
En marzo se realizará un congreso en la ciudad de Guipúzcoa que tratará este problema para la apicultura. El acto contará con el testimonio de expertos y apicultores franceses, que explicarán cómo actuar ante esta especie.
9.000 colmenas menos en dos años
En los dos últimos años se ha experimentado la pérdida de 9.000 colmenas, lo que implica graves consecuencias para el sector de la miel. Los dos principales problemas de la apicultura valenciana han sido importados y se calcula que han sido la causa de la reducción de hasta un 40% de la población de abejas. Por una parte, a mediados de los 80, el ácaro Varroa se instaló procedente del sudeste asiático en la C. Valenciana, perjudicando al sector. A esto se añade el síndrome de despoblamiento de colmenas, que tampoco se originó en el continente europeo y cuyo tratamiento aún no está definido. La apicultura valenciana es considerada por el Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino la primera en España por producción.
