La empresa Oil and Gas Capital ha pedido autorización al Gobierno para buscar hidrocarburos en una franja comprendida entre el mar Mediterráneo -Tavernes de la Valldigna y Gandia y las poblaciones de Carcaixent y Barx al interior, en un espacio de unas 20.000 hectáreas cuyo interés principal radica en la posible presencia de depósitos de gas "no convencional", un recurso no utilizado hasta ahora en España pero que está revolucionando el mercado energético.

La empresa peticionaria guarda silencio. Se trata de no dar pistas. La legislación española permite que durante dos meses otras firmas puedan solicitar competir "en concurrencia "con Oil and Gas Capital en la exploración del área de Gandia.

Fulgencio Jiménez de la Peña, Consejero Delegado de Oil and Gas Capital recordó que el permiso de investigación de Hidrocarburos ampara la búsqueda de gas y petróleo y de posibles depósitos de estos materiales sin ofrecer más pistas sobre el interés de la compañía.

Sobre la existencia de un área marina dentro del permiso, Fulgencio Jiménez recordó que la ley de Hidrocarburos obliga a delimitar polígonos rectangulares. "Si la forma de la reserva fuera libre no habríamos incluido la parte marina, pero no hacerlo suponía dejar fuera un objetivo exploratorio".

Sobre el hecho de que el permiso afecta a "solo" 20.000 hectáreas, una superficie muy reducida para lo que es habitual en el sector, Fulgencio Jiménez recordó que para perforar "basta con una hectárea", aunque dijo que el motivo es el "conocimiento" que tienen de la zona. "En Oil and Gas Capital están las personas que probablemente más saben de la geología del petróleo en España. Sabemos lo que buscamos".

Gas "no convencional"

Pese al silencio de Jiménez de la Peña, Fuentes del sector explicaron que la solicitud de Gandia parece ir dirigida a la búsqueda del denominado "gas no convencional", un gas natural contenido en formaciones rocosas de difícil producción y cuya explotación ya es posible gracias a nuevas técnicas como la perforación horizontal o la fragmentación hidráulica.

En muchos estados de Norteamérica, los gases contenidos en esquistos arcillosos han supuesto una revolución que ha cambiado la perspectiva energética. El gas "no convencional", hallado y explotado por pequeñas compañías en estas formaciones geológicas, representa el 50% del consumo de gas en Estados Unidos, que ha visto reducida en esa misma proporción su dependencia del petróleo y el gas. En Europa, acabar con la "dictadura" del suministro ruso o argelino es posible, creen los expertos.

Los promotores de la exploración de hidrocarburos en la Safor cuentan, además de con una geología favorable, con la proximidad de varios gasoductos claves en la distribución de gas en España, y la cercanía de centros de consumo y como la industria azulejera.