El microbiólogo y decano de la Facultad de Veterinaria de la Universidad CEU-San Pablo de Valencia, Santiago Vega, calificó ayer de "inevitable" la expansión de la avispa asiática que ha sido detectada ya en la península y que amenaza las alicaídas colmenas de abejas en España. Santiago Vega, que lleva años investigando la aparición de nuevos vectores transmisores de enfermedades y plagas, recordó que la llegada de la avispa asiática no es un hecho aislado y aseguró que la "globalización" hace inevitable la aparición de nuevas plagas.

"De momento solo se ha detectado en el norte de España -recordó en relación a la avispa asiática o "asesina"- pero no cabe duda de que puede aparecer en cualquier momento y eso no es alarmar, es hacer referencia a una realidad". Según este investigador, en el caso de la avispa asiática tan solo cabe "estar preparados" por si aparece. Diseñar trampas y construir otro tipo de colmenas que impidan el acceso a la avispa- más grande que las abejas- son algunas de la medidas a tomar".

La avispa asiática puede arrasar colmenas enteras en muy poco espacio de tiempo y en Francia lleva años provocando severos daños.

"Estamos asistiendo a la aparición de enfermedades nuevas y la recuperación de otras que parecían eliminadas de la historia de la medicina y la veterinaria o ligadas a vectores confinados en determinada parte del mundo", explicó el profesor.

"La globalización y el cambio climático hecho que insectos, pájaros e incluso el hombre aparezcan como portadores o transmisores de enfermedades nuevas o de otras que parecían arrinconadas", añadió.

En este sentido el profesor Vega recordó que la situación de Valencia, con uno de los principales puertos del Mediterráneo, el clima, la proximidad de grandes humedales como el de la Albufera o las migraciones de aves, además del intenso tráfico de personas y bienes, convierten a la Comunitat Valenciana en una puerta de entrada para muchas de esas enfermedades.

El investigador se mostró especialmente preocupado por la posible expansión del virus del oeste del Nilo, del que recientemente ha aparecido un caso en Andalucía, aunque añadió que las políticas preventivas que se estan adoptando son suficientes. "Son tantos los frentes de intrusión, que es muy complicado tenerlo todo bajo control. Lo importante es la prevención, pero tiene también un coste muy elevado", concluyó.