Los viajes exprés están de moda y The New York Times lo sabe. Por ello no ha querido dejar la oportunidad de guiar a sus lectores en una visita de tan sólo 36 horas en una ciudad que "cocina algo más que arroz", Valencia. Para este prestigioso medio estadounidense, la llegada del AVE, la celebración de la Copa del América y la culminación de las obras de Calatrava en la Ciudad de las Artes y las Ciencias convierten a la ciudad en punto de referencia turística internacional, "indispensable para todo viajante con sentido común". La guía va marcando, hora por hora, los lugares y las opciones de ocio que ofrece la ciudad.

Viernes, 16 h. De compras por El Carmen. La visita comienza viernes a por la tarde. Para el diario americano, el Carmen se encuentra lleno de "estudiantes barbudos y elegantes urbanitas". El Mercado Central y sus alrededores aparecen como epicentro para la moda, con tiendas como Prada y Aston Martin, así como Bugalú y Su Caniche Asesino. Subraya que estas lujosas tiendas se encuentran al lado de la Lonja de Seda del siglo XV, aunque sin nombrar que es Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.

18 h. Original de Valencia. En este apartado la publicación, en su edición electrónica en inglés, invita a tomarse uno de los productos típicos valencianos, la horchata, haciendo referencia a su origen árabe. Para ello, recomiendan pasarse por la Horchatería El Siglo, junto a la iglesia de Santa Catalina. Indican también que esta bebida se toma con otro producto oriundo de Valencia, los "fartons", a los que define como "un pastel mullido con forma de dedo, recubierto por azúcar en polvo".

21 h. De tapas. La escena culinaria valenciana está viendo crecer nuevos talentos y esto no pasa por alto para The New York Times. Destaca Carosel, de Jordi Morera, que conjuga la cocina tradicional con la más contemporánea.

23 h. De juerga en El Carmen.

Esta guía define El Carmen como el centro de la acción nocturna, concentrada en la plaza del Tossal. Nombran en este apartado al bar Los Picapiedra, "donde estudiantes y bohemios beben en vasos que parecen cubos y escuchan rock español".

Sábado, 10 h. La ciudad futurista.

La guía dedica la mañana del sábado, segundo día del viaje, a la Ciudad de las Artes y las Ciencias. Para llegar hasta allí se habla del servicio público de alquiler de bicicletas, Valenbisi. Coger una bici cerca de las Torres de Serranos, "una de las puertas antiguas de la ciudad", y pedalear por el viejo cauce del río Turia hasta las construcciones de Calatrava. L'Oceanogràfic aparece como un apasionante complejo marino donde se puede "disfrutar por los túneles submarinos con los tiburones pasando por arriba de tu cabeza".

12 h. Un refugio alternativo

En este apartado la guía muestra el carismático barrio de Russafa, el que, según la publicación, se ha convertido en refugio alternativo para estudiantes y artistas. Destaca Slaughterhouse Book y Gnomo.

14h. Tapas estilo familiar.

A la hora de comer la guía invita a una de tapas en el Maipi en Russafa, local del que dice que van los hombres de negocio al finalizar la jornada laboral y sustituyendo la siesta por unas cervezas.

17h. Ruinas bajo el cristal.

El museo de la Almoina es el siguiente punto en la ruta americana. La novedad que presenta poder observar las ruinas a través de un cristal y una lámina de agua no ha pasado desapercibida para el autor, Charly Wilder, que hace hincapié en la importancia del lugar, al ser "el sitio donde Valencia fue fundada por los romanos en 138 a.c".

21h. Recorridos moros. El paso de la civilización árabe por la ciudad despierta gran interés turístico. De esta manera se invita a visitar el restaurante Balansiya, en el Paseo de las Facultades, donde los turistas pueden degustar todo tipo de especialidades árabes.

24h. Fiesta en el museo.

Se vuelve indispensable otra noche de fiesta. Tras una visita al Café Negrito, en la plaza del mismo nombre, la guía menciona la discoteca Mya sita en la terraza de l'Umbracle, Estudio 54.

Domingo, 11 h. Compras en el rastro.

La noche fue brava y por eso las últimas horas en la ciudad el turista las disfruta con tranquilidad, haciendo unas compras en el Rastro que se encuentra junto al estadio de Mestalla.

13h Paella en la playa.

No podía faltar la paella en toda visita de turista a la ciudad. Así, la guía recomienda acercarse hasta el paseo marítimo y entrar en restaurantes como La Pepica o L'estimat, "las mejores opciones" para degustar el plato típico por excelencia.

14h. Paseo por el Cabanyal. Para digerir el copioso almuerzo la ruta turística plantea un paseo por el Cabanyal, no sin antes hacer mención del "polémico plan que pretende entrar con una excavadora en el barrio, con edificios antiguos pero decrépitos" con el objetivo de "regenerar un distrito conocido por el crimen, la delincuencia y la prostitución". La publicación explica que tal vez un día se encuentren las "elegantes casas de Art Nouveau inalteradas".

Recomendaciones finales.

El reportaje concluye con unas recomendaciones complementarias en cuanto al transporte y el alojamiento. De nuevo, reitera que la llegada de la alta velocidad a la ciudad ha supuesto un gran avance, y propone como posibles hospedajes El Palau de la Mar, en Navarro Reverter, o el Petit Palace Germanías, en el barrio de Russafa.