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La solidaridad de la Safor, canalizada a través de la Associació Comarcal d'Ajuda al Poble Saharaui-la Safor (Acaps), ha hecho posible la inauguración del hospital Suleiman Ramdan, que permitirá la atención y cura de los afectados de tuberculosis pulmonar a los campamentos de refugiados saharauis. Las fuentes de financiación para la construcción del centro hospitalario han surgido de la misma población de la Safor, gracias a la ayuda del 0,7% del presupuesto de 2009 del Ayuntamiento de Gandia y de colaboraciones de varios consistorios de la comarca.

El hospital Suleiman Ramdan fue inaugurado la pasada Navidad por una delegación de Acaps y por el ministro de Salud Pública del Sahara y sustituye al antiguo centro médico que estaba en condiciones precarias, ruinosas, y muy alejado del centro de las infraestructuras sanitarias de los campamentos de refugiados. El hospital tiene capacidad por acoger doce enfermos y las dependencias necesarias para el suyo funcionamiento como sala de curas, farmacia, salas de estar, cocina o comedor. La clínica también dispone de energía eléctrica continuada, lo cual también permite comodidades como la de disponer de aire acondicionado a las dependencias comunes.

Con todo, todavía hay carencias en el mobiliario que serán subsanadas con la ayuda de 10.000 euros procedentes del 0, 7% del presupuesto de 2010 del Ayuntamiento de Gandia. Gracias a esta aportación el centro podrá contar con camas nuevas, armarios para las habitaciones y para la farmacia, mobiliario de las consultas, renovar los utensilios del comedor y de la cocina.

El proyecto,sin embargo, no acaba con la inauguración y la llegada de los primeros enfermos. La tarea ahora sigue siendo difícil. Hay que asegurar el funcionamiento del centro: las prioridades son amueblar en condiciones óptimas el edificio, mejorar el sistema de abastecimiento de agua, asegurar la manutención alimentaria y sanitaria de los enfermos, proveer fondos para incentivar los profesionales que trabajan y completar la red de aire acondicionado a las habitaciones, entre otras necesidades. Acaps afirma que los refugiados "continúan esperando, exiliados a la Hamada de Tinduf, la posibilidad de expresar, a través de un referéndum, como determina la ONU, su voluntad en el proceso de descolonización", que fue abortado en 1975 por el abandono español del territorio a manos de Marruecos.