A principios del siglo XIX, una facción del entonces incipiente socialismo (los ludditas) se hizo famosa por su visceral reacción contra las máquinas, que en el inicio de la revolución industrial era el símbolo de la pérdida de trabajo para el obrero. Aunque ayer en Paterna nadie tenía intención de romper nada, un grupo de hosteleros se rebeló contra las máquinas y sacó a la calle las expendedoras de tabaco: era su forma de decir al Gobierno que si se prohíbe fumar en los bares, con el consiguiente perjuicio para el sector, el Estado se quedaría sin recaudar, al menos por unas horas, los impuestos por la venta de cigarrillos en el interior de sus locales.

Esta fue la imaginativa forma de insumisión a la ley del tabaco que ayer protagonizaron junto a la Torre de Paterna varios cientos de personas, convocadas por el grupo de hosteleros independientes. Estos empresarios de Paterna y otros municipios portaron con camiones varias decenas de máquinas y las exhibieron a modo de protesta junto al ayuntamiento.

Según explica su portavoz, unos 250 locales de Paterna y otros pueblos como Quart de Poblet, Manises, Torrent, Benetússer, Chiva, etc. se han agrupado para "reivindicar el derecho a tener un espacio habilitado para fumar". "De los 27 de la Unión Europea sólo tres países impiden este derecho", explicaba Jesús Fernández, portavoz de este colectivo.

Otro conocido hostelero del municipio, Gregorio Anaya, cifraba en ocho los locales que han cerrado en lo que va de año, afectados por la ley del tabaco. "Las ventas han caído en un 60%, sobre todo en las sobremesas de la comida y los almuerzos", comentaba Gregorio a este diario.

La protesta de los hosteleros recibió la adhesión de la Federación Empresarial de Hostelería de Valencia (FEHV). Su presidente, Juan Carlos Gelabert, cifró entre 25.000 ó 30.000 euros las pérdidas diarias en toda la Comunitat Valenciana para el sector, por conceptos como la simple reducción de cafés.

Agradecen el apoyo del ayuntamiento

El grupo de hosteleros independientes, que ayer protestaba en Paterna contra la ley del tabaco aprobada por el Gobierno, destacó al mismo tiempo el apoyo del Ejecutivo municipal. "El ayuntamiento ha entendido que debe apoyarnos a los hosteleros", apuntaba Jesús Fernández, portavoz del colectivo. Así, destacó que se han reducido los impuestos por colocar terrazas, y se están haciendo marquesinas de madera, así como toldos para proteger a los clientes de la lluvia y a los vecinos, del ruido. "Paterna es un ayuntamiento referente para toda España", concluyó Fernández.