El Tribunal Superior de Justicia de Valencia ha abierto juicio oral contra el portavoz socialista en las Corts, Ángel Luna, por negarse a revelar cómo le llegó el informe bajo secreto del caso Gürtel que exhibió en el parlamento valenciano. El juez del TSJ Juan Montero, instructor de la causa, dictó ayer el auto de apertura de juicio al entender que sí existen indicios de delito frente a la posición del fiscal que pidió el archivo de la causa. El PP, que ejerce la acusación popular, ha reclamado que Luna sea inhabilitado durante dos años y nueve meses, y que pague una multa de 25.500 euros. Luna es el cabeza de lista del PSPV por Alicante para las próximas autonómicas.

La causa abierta contra Luna parte de la denuncia que presentaron el 25 de marzo de 2010 en la que advertían de que el síndic socialista había exhibido y leído en las Corts párrafos de un informe del caso Gürtel sobre el coste de la visita del Papa que estaba bajo secreto de sumario. El parlamentario prestó declaración por un delito de revelación de secreto y aseguró que no sabía el nombre de la persona que le había facilitado el documento. El magistrado archivó en febrero la causa por revelación de secreto, pero mantuvo abierta la de encubrimiento.

Montero insiste en el auto que dictó ayer en que hay indicios de criminalidad como ya apuntó el 23 de febrero. El juez considera que Luna "no podía dejar de conocer que el informe que exhibió tenía el carácter de actuación procesal declarada secreta" y que la persona que se lo filtró estaba cometiendo un delito. El magistrado cree que el parlamentario socialista pudo incurrir en el encubrimiento, que se castiga por "la ocultación del cuerpo, los efectos o los instrumentos de un delito para impedir su descubrimiento".

"Ocultó el ejemplar"

Juan Montero sostiene que el síndic ocultó "el ejemplar del informe que tuvo en su poder. No se trata de que lo exhibiera en tribuna de las Corts el 24 de marzo, sino que cuando se le requirió formal y judicialmente para que lo presentara alegó que desconocía dónde se encontraba". El magistrado no se creyó la versión de Luna de que se despreocupó del ejemplar del informe en cuanto se levantó el secreto de sumario y ya señaló en su anterior auto que "la ocultación se hizo al efecto de impedir que se descubra al autor de la revelación de la actuación procesal declarada secreta".

El magistrado recuerda en la providencia de ayer que la jurisprudencia del Supremo permite abrir juicio oral contra el criterio del fiscal si la acusación popular lo pide. El juez ha decidido no acordar ninguna medida cautelar puesto que la acusación popular no lo lo solicitó. Montero indica en el auto que el caso debe ser juzgado en el TSJ porque Luna es aforado.

El magistrado ha dado tres días de plazo al fiscal para que formule su escrito de acusación, aunque es un trámite puramente formal ya que la Fiscalía está convencida de que no hay delito. Luna no puede recurrir la apertura de juicio oral. Sin embargo, la sala del TSJ todavía tiene que resolver dos recursos del parlamentario, que podrían acabar con el archivo del caso.