El joven marroquí detenido en Benitatxell (la Marina Alta) el pasado 27 de agosto por su presunta relación con el terrorismo islámico, Faical Errai, sostiene en una carta enviada a este diario que no tiene ninguna relación con grupos yihadistas: "no soy un terrorista ni un radical, sólo soy una persona normal". Faical, que sólo tiene 26 años, fue acusado tras unas investigaciones desarrolladas por la Guardia Civil, de realizar labores de reclutamiento y de envío de terroristas a zonas de conflicto, así como de recaudar dinero para organizaciones terroristas. Faical niega las acusaciones: "Sólo soy informático y no pienso pagar por lo que no soy y menos por un delito de terrorismo". Desde su detención y tras prestar declaración en la Audiencia Nacional, se encuentra en prisión preventiva en Villena, donde ha sido trasladado tras una estancia en el módulo de aislamiento de la cárcel de Alcalá Meco, en Madrid.
Maltrato y tortura
Este joven reconoce el miedo que ha pasado desde su detención. "Lloro porque no sé si volveré a ver a mi familia. Las horas son interminables", cuenta. Sin embargo, Faical escribe que ha sido "maltratado y torturado" y señala también que le han "amenazado con enviarlo en un avión a Estados Unidos y nunca volvería a ver a mi familia".
Este chaval afirma haber estado "muerto de miedo" y explica que le pusieron "una cuerda en la boca y una bolsa negra en la cabeza. No sabía donde estaba".
No es lo único que denuncia. También expone que ha llegado a estar enfermo durante su estancia en Madrid, y que han tenido que trasladarlo de urgencia al hospital en varias ocasiones. "Llevo más de 200 días en el módulo de aislamiento y estoy maltratado psicológicamente", señala.
Según relata, en 2009, sin tener trabajo, empezó a "comprar y vender dominios por internet" donde tenía más de 50. Según afirma, el último que vendió fue para un portal turístico de Benidorm (la Marina Baixa): www.benidorm.com. Faical explica en su carta que en internet "hay miles de páginas islamistas que se manifiestan contra los gobiernos corruptos y miles de jóvenes forman parte de ellas a través de redes sociales como facebook o twitter o foros árabes que también son miles". Faical cuenta que "las revueltas del pueblo árabe son por la libertad de expresión y por la dignidad y la democracia, y por un futuro mejor para todos".
"Yo sólo entraba en chats de internet para conocer gente de todo el mundo", explica. "Era analista de páginas web, entraba en muchas direcciones de internet. Es normal" dice.
"Condeno el terrorismo"
"A mi no me gusta la violencia", escribe, "soy pacífico y nunca he tenido ningún problema con la ley". Afirma querer contar "mil historias" y cree que "aunque está condenado a sufrir por los demás, hay que pensar en una vida mejor". Pide "justicia", quiere volver a su casa y condena "cualquier acto terrorista en cualquier parte del mundo".
"Soy el mismo de toda la vida, el mismo que era en el pueblo. Nadie me va a cambiar ni me va a convertir tampoco en un terrorista", se despide.
