Castelló y Valencia, con 44 casos, se encuentran entre las 25 provincias de España con municipios en los que se han detectado posibles empadronamientos irregulares desde los comicios locales de 2007 y que no han respondido a los requerimientos de información realizados.

Concretamente, la Oficina del Censo Electoral remitió a la Junta Electoral Central 43 expedientes de este tipo referentes a Castelló y uno de Valencia, pero no consta ningún caso en Alicante.

Esta es una de las actuaciones llevadas a cabo por la Oficina del Censo para evitar eventuales fraudes ante las elecciones municipales del próximo 22 de mayo. Según explicaron fuentes del Instituto Nacional de Estadística, donde se encuentra la Oficina del Censo, este organismo cuenta con un sistema de alerta que detecta los aumentos sospechosos de empadronados. En concreto, entre las elecciones municipales de mayo de 2007 y el pasado mes de febrero, el sistema de control de altas de la citada oficina ha detectado "variaciones significativas" en el número de electores en 395 municipios y entidades locales menores, con lo que se han originado un total de 672 actuaciones. La Oficina del Censo instó a los ayuntamientos a justificar esos movimientos en el padrón, pero 121 no han respondido y se ha informado a la Junta Electoral Central. También se han investigado reclamaciones de particulares y de formaciones políticas en 14 municipios, con lo que en total se han solicitado 686 informes.

De todos estos casos la oficina ha realizado inspecciones presenciales en 5 ayuntamientos para comprobar la veracidad de las altas. Aún no se han presentado denuncias ante el Ministerio Fiscal.