Francisco Camps es el presidente de la Generalitat pero también es alguien como usted, que se emociona con las cosas sencillas de la vida, que goza con sus hijos, ama a su tierra y sabe lo que es trabajar desde pequeño, ayudando a sus padres en la empresa familiar.

El vídeo del jefe del Consell exhibido el lunes en el almuerzo de despedida de la legislatura muestra -con música bucólica y un filtro para envejecer las fotografías- la faceta más humana y personal de Camps con la que los populares buscan definir una imagen de proximidad a los ciudadanos. Una estrategia casi obligada del PPCV tras el gran desgaste sufrido a raíz de la causa de los trajes del caso Gürtel. "Jo sóc d'esta terra, sóc d'este poble, treballe per esta terra i per este poble del que forme part. Sóc uno més", proclama Camps, en valenciano, idioma que alterna con el castellano.

El vídeo, de seis minutos, arranca con imágenes de la Ciutat de les Arts y un presidente que riega la autoestima. "La Comunitat Valenciana siempre ha sido moderna, en cualquiera de los siglos", afirma en un formato de entrevista, para rematar: "Yo, orgulloso de Valencia, he estado siempre, toda mi vida (...). Tener la oportunidad de ir fuera para hablar de la Comunitat Valenciana es lo más grande del mundo".

Luego, con primeros planos, baja al terreno más íntimo para revelar que se "enamoró" del "concepto" y las "costumbres de nuestra tierra" en su "propia casa, con mis mayores". "Recuerdo la relación con mis abuelos, la sensación de ternura y de cercanía constante de los cuatro", dice, para evocar la casa de su abuelo, "el huerto de naranjos", al que vuelve "porque es una especie de llamada de la tierra".

"Yo he aprendido a trabajar en mi casa, con mis padres, dueños de una pequeña fábrica", refiere el presidente, que añade: "Yo he recibido de los dos una misma manera de entender la vida, que es mi manera de entender la vida. He visto a mis padres toda mi vida trabajar de lunes prácticamente a domingo, no tener prácticamente vacaciones durante el año (...)Yo he estado sábados y domingos delante de las máquinas. Eso me ha marcado mucho, la responsabilidad del trabajo, el esfuerzo, compartir lo que estás haciendo todos los días con los más cercanos a ti..."

Con Pla... y Costa

El presidente alude también a sus hijos, con quienes habla "absolutamente de todo", juega, intenta desayunar con ellos o se reserva los fines de semana. "Ver reír a mis hijos, por ejemplo, viendo los hermanos Marx, escuchándoles la misma risa que yo tenía, me hace reír". También se acuerda de sus profesores, de "cada clase" y "cada aula" en la que estuvo, de su "primer amic". "Me di cuenta ya desde muy joven que las cosas que ocurrían me preocupaban, me entristecían o me alegraban", sugiere como explicación a su vocación política. A Camps le "conmueve" el arte porque "está hecho con el corazón de un artista". El vídeo hace un guiño al exlíder socialista Joan Ignasi Pla, con la foto del Estatuto de 2006... en la que también aparece, en una esquina, Ricardo Costa.

"Ganar el Mundial unió a la Nación"

El presidente también confiesa en el vídeo su pasión por el fútbol. "Ganar la Copa de Europa en Viena y ganar el Mundial, para los españoles aficionados al fútbol y no aficionados al fútbol, es algo realmente mágico. Unió a la nación uniéndonos a todos", asevera Camps, quien revela la incontrolable euforia de aquella noche, como cualquier forofo de "la Roja", y la necesidad de compartir la alegría con sus amigos, sus padres, sus hijos. "Pues eso lo he vivido yo". Es el final de la cinta. El broche son imágenes de los éxitos del Valencia, el Villarreal y el Power Valencia, los ascensos del Hércules y el Levante, con Fernando Alonso y los campeones de motociclismo. Y como remate, Camps contemplando embelesado la Copa de las 100 Guineas de la America's Cup.