La Conselleria de Medio Ambiente ha elevado a 25 el número de delfines hallados muertos en las playas valencianas en las últimas semanas. En concreto, 16 ejemplares se encontraron hasta el pasado viernes y nueve más se localizaron en los últimos días.

La Generalitat activó la semana pasada un protocolo de emergencia para la recogida rápida de cetáceos en el litoral valenciano y la realización de autopsias tras detectar una mortandad anormal. Las necropsias efectuadas a algunos de los ejemplares varados confirman la presencia de un morbillivirus específico de los delfines.

Además, la conselleria dio parte al Ministerio de Medio Ambiente para que active la red estatal de control de varamientos de cetáceos con el fin de que este plan de emergencia tenga una "mayor eficacia" en todo el Mediterráneo.

Alertados por este incremento, particularmente en el caso del delfín listado (Stenella coeruleoalba), la Universitat de València ha remitido muestras de cadáveres frescos a la Universidad Complutense, que cuenta con amplia experiencia en la detección de enfermedades virales en cetáceos.

Los anteriores brotes de esta enfermedad se produjeron en 2007, con una mortandad de unos 80 ejemplares, y en 1990.