Cualquier ciudadano de la Comunitat Valenciana que tenga una hernia de disco que le cause dolor y que además curse con una afectación neurológica que le ocasione pérdida de movilidad y déficit motor con limitación del movimiento, como lo que tiene el presidente Camps, será operado en menos de una semana en cualquiera de los hospitales de la red pública valenciana, según afirma la Conselleria de Sanidad.

Fuentes del departamento que dirige Manuel Cervera indicaron que una persona con hernia discal, con síntomatología dolorosa y claudicación (se denomina así en argot médico a la pérdida de movilidad y déficit motor) podría ingresar por urgencias y ser intervenido en un plazo de 24 a 48 horas.

De hecho, cualquier paciente con los síntomas que Camps arrastra desde hace semanas como consecuencia de una hernia discal lumbar ya hubiera pasado por la mesa de quirófano.

No son los mismos tiempos de espera si el paciente tiene una hernia discal con dolor pero sin afectación neurológica, es decir si el disco intervertebral desplazado ligeramente de su lugar no presiona la médula ni los nervios y no causa limitación motora.

En este caso, y según indicaron fuentes de la conselleria, la operación podría retrasarse unos seis meses. El dolor se trataría con fármacos.

Sin embargo para someterse a una infiltración no hay retardo, ya que este tratamiento se ordena cuando el paciente sufre un cuadro agudo de dolor. A más tardar, se realiza en la misma semana que lo prescribe el médico.

El neurocirujano del hospital Peset Andrés Cánovas explicó a Levante-EMV que una hernia discal se produce por una disminución de la hidratación de los discos intervertebrales.

"Se produce una pequeña fisura en la membrana del disco y éste puede herniarse (salirse); si se sale hacia la parte interna de la columna puede presionar la médula y algunos nervios, eso es muy doloroso y a veces produce pequeñas parálisis", detalló el doctor Cánovas.

El especialista, que también es secretario general del Sindicato Médico, manifestó que estas lesiones se curan con reposo y tiempo, "la hernia se reabsorbe y se seca". Cánovas explicó que una infiltración consiste en inyectar en la zona de la hernia productos anestésicos y antiinflamatorios para rebajar la pequeña rebaba que constituye la propia hernia.

El tratamiento conservador con infiltraciones que se ha aplicado a Francisco Camps elimina el dolor y hace que la hernia desaparezca, "porque se seca y se corrige sola".

Cánovas indicó que una de cada cuatro personas mayores de cuarenta años presenta una hernia discal con afectación neurológica en mayor o menor grado.