El Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) ha señalado que el vertido de agua que se detectó en el último trimestre de 2010 del reactor de la central nuclear de Cofrentes (Valencia) a su pozo seco es un 14 por ciento del máximo permitido, es decir, un 86 por ciento por debajo del límite, y lo califica de "normal en el funcionamiento de cualquier central".

Así, fuentes de CSN han explicado a Europa Press que este vertido está "muy por debajo" del máximo permitido por las especificaciones técnicas de la planta y que "no supone ningún problema para el funcionamiento" de Cofrentes. En todo caso, señala que el hecho de que se haya detectado este vertido forma parte de la vigilancia continuada de las instalaciones radiactivas.

Además, el regulador nuclear español ha explicado que este volumen de 4.000 litros diarios contabilizado en el trimestre del pasado año al pozo seco pasa después al sistema de tratamiento y procesado de vertidos.

Por su parte, en una nota de prensa, el titular de Cofrentes ha señalado este martes que tantos las instalaciones convencionales como las centrales nucleares disponen por diseño de sistemas controlados de recogida de agua que, procedente de la limpieza, condensación o diversos componentes, llega habitualmente a los sumideros situados en el suelo de los edificios.

Asimismo, añade que en el caso de las centrales nucleares, el agua de estos drenajes de los distintos edificios es enviada a un centro de tratamiento y procesado desde el que se devuelve posteriormente al circuito principal.

"No hay nada anormal en operar de este modo", asegura la central valenciana porque este proceso está "establecido así por diseño", al tiempo que añade que este vertido se encuentra en un circuito cerrado y controlado que impide "cualquier tipo de pérdida de agua".

Finalmente, subraya que la central funciona mediante drenajes canalizados de sistemas que aportan a la operación de la planta "plenas garantías de seguridad".

Botella: "No hay ninguna contaminación"

La delegada del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Ana Botella, ha afirmado que el vertido de agua que se detectó en el último trimestre de 2010 del reactor de la Central Nuclear de Cofrentes (Valencia) a su pozo seco "no produce ninguna contaminación ni afecta radiológicamente a nadie".

Botella se ha pronunciado en estos términos en declaraciones a los medios de comunicación tras asistir a la presentación de los trabajos de cartografía del buque 'Vizconde de Eza', al ser preguntada por la denuncia de la Plataforma Tanquem Cofrents (Cerremos Cofrentes, en castellano) sobre posibles fugas de agua en la central.

A este respecto, la delegada ha pedido a todas las entidades --y en especial a Tanquem Cofrents-- que las informaciones que emitan sean "lo más rigurosas posibles" porque "pueden ocasionar temores o inquietudes en la opinión pública". "Y esto es una responsabilidad muy grande", ha agregado.

La información de esta plataforma, ha indicado Botella, "supone su interpretación de los informes que, con la máxima transparencia, el Consejo de Seguridad Nuclear y la propia central van comunicando a cada momento dentro de los procesos de transparencia". A su juicio, "es una interpretación absolutamente fuera de lugar y muy alarmista".

Así, ha explicado que el proceso de emisión de fluidos o aguas "forma parte del circuito interno de movimientos de aguas dentro de propia central. En ningún momento sale del circuito y está absolutamente dentro de la normalidad", ha apostillado.

Por ello, ha indicado que el hecho de que en un informe técnico se utilice la palabra 'fuga', no es que exista como tal, sino que es un término "técnico" que se refiere a la salida de fluidos o aguas, "pero sin salirse del recorrido interno de la central". "No se emite a ningún sitio externamente y tampoco produce ninguna contaminación ni afecta radiológicamente a nadie", ha concluido.