Al margen del juego que pueda dar al PP un parlamento con tres grupos en la oposición, existe unanimidad en las filas populares en que el nuevo escenario no será precisamente cómodo para el presidente Francisco Camps, quien todos los jueves tendrá que someterse a la sesión de control con el caso Gürtel como telón de fondo. Los populares temen una oposición radicalizada por el grupo socialista que lidera Jorge Alarte. En el PP creen que el socialista no rebajará el tono duro que imprimió Angel Luna. Con Compromís y EU compitiendo por su visibilidad, el PP tiene claro que necesita un grupo bien entrenado. Algunos de los diputados salientes han pedido a Camps que el actual portavoz del grupo, Rafael Blasco, siga. Argumen?tan que se necesita una persona experimentada que, llegado el momento, evite que la oposición lidere la agenda política. No obstante, hay otros candidatos para un puesto que da mucha visi?bi?li?dad, pero que obliga a estar en la trinchera de forma permanente. Gerardo Camps podría afrontar este reto de manera transitoria hasta las generales. Otras fuentes apuestan por el regreso del conseller Serafín Castellano.

El panorama, según las fuentes consultadas, también precisa una presidencia de las Corts bien atada y ven idóneo para el puesto a Alejandro Font de Mora. Sin embargo, otras fuentes apuestan que por cuota territorial el cargo será para el ex alcalde de Alicante, Luis Díaz Alperi.