El aún alcalde de Gandía -dejará de serlo este sábado-, José Manuel Orengo, ocupará un escaño en la Diputación de Valencia pero no será el portavoz socialista. Orengo ha declinado la oferta del secretario general del partido, Jorge Alarte, de llevar las riendas del grupo provincial en sustitución de Rafael Rubio, que ha dado el salto a las Corts. Alarte se desplazó a la capital de la Safor apenas 48 horas después de la catástrofe electoral para dar ánimos al alcalde derrotado y participar en la reunión extraordinaria de la ejecutiva local en la que se hizo una primera evaluación de la situación.

"Será lo que quiera ser", explicaron desde el entorno de Alarte en alusión al ofrecimiento del líder del partido a quien es uno de los dirigentes más considerados del PSPV. En la propuesta se incluía la portavocía. Sin embargo, Orengo entiende que tras haber perdido la alcaldía debe centrarse en su labor de oposición en el ayuntamiento. El todavía alcalde de Gandia, considerado una de las opciones de relevo para Alarte, prefiere, además, seguir guardando distancias.