Si Canal 9 fuera un partido político tendría representación en las Corts por los pelos. Solamente un 5,4 % de los espectadores de televisión de la Comunitat Valenciana votan por el primer canal público autonómico. Su cuota de pantalla va cayendo en picado mes a mes. En mayo tocó fondo con un 5,6 %. Siguió escarbando y en junio perdió dos décimas más de audiencia hasta situarse en el peor registro en sus veintidós años de historia.

Nou 2 y Nou 24, las otras dos propuestas del grupo RTVV, apenas suman un raquítico 0,3 %, según los datos recogidos en el último informe de Barlovento Comunicación que ha inspirado un informe de la sección sindical de Comisiones Obreras en el que se culpa del fracaso al modelo televisivo que sigue Canal 9, que, según el sindicato, "incumple gravemente" su función de servicio público. La cuota de pantalla y la deuda acumulada (en torno a l0s 1.200 millones de euros) cada vez están a mayor distancia. La segunda sigue disparada y el número de espectadores va retrocediendo. RTVV ha perdido peso en el conjunto de las autonómicas, cuya audiencia media en junio se situó en el 9,9 %, prácticamente el doble que la televisión valenciana.

En puestos "de descenso"

TV3, con un 13,8 %, la gallega TVG (11,2 %) o Canal Sur (10,4 %) son las que más cotizan en el mercado de la Forta. Aragón TV o la vasca ETB, con un 9,7 % y un 7,7 %, respectivamente, están también por delante de la valenciana. Solamente la joven televisión de Murcia (7RMurcia) y la balear IB3 ocupan posiciones más retrasadas en casi todos los días de junio. En 19 de esas 30 jornadas, Canal 9 ha sido la penúltima o la antepenúltima en la clasificación de audiencias. En todo el mes, ni un sólo día se situó por encima de la media. Es más, en uno de cada tres días ni siquiera alcanzó el 5 %. No informar de casos de corrupción política que afectan al Consell, como Gürtel, no ha sido la solución para salir de pobres. En 2009, la media fue del 11,8 %. Al año siguiente se quedó en el 8,4 %.

El director general de RTVV, José López Jaraba, atribuyó entonces el retroceso a la irrupción de las TDT y la puesta en marcha de nuevos canales temáticos. Con todo, el resto de televisiones autonómicas han aguantado mejor la competencia, dado que en dos años han retrocedido 3,7 puntos, prácticamente la mitad que Canal 9, según el informe de CC OO con datos de Barlovento Comunicación. En el desierto en que se ha convertido RTVV, hay algún oasis de éxito, aunque sus productoras tengan problemas para cobrar. El caso más notorio es L' alqueria blanca, con audiencias que rondan el 20 %. Trau la llengua, De temporada, Senyor rectorGuamipi son otras de las excepciones de éxito. Lo cual demuestra que el uso del valenciano no es la causa del fracaso. Porque, aunque parezca mentira, es cada vez más una lengua minoritaria en TVV. El 43 % de los programas e informativos es en valenciano, frente a un 57 % de la rejilla en castellano. Si se computaran los minutos de publicidad las cifras serían más demoledoras en contra de un valenciano que tiene en Nou 2 y Nou 24 su reserva india. Ahí está casi en exclusiva (89 % del tiempo), aunque ha retrocedido 6 puntos. La promoción del valenciano es el segundo de los principios recogidos en el artículo segundo de la Ley 7/1984 de creación de RTVV. La "veracidad e imparcialidad" y el respeto al "pluralismo político" son otros de los objetivos fundacionales de Canal 9.

Los programas de producción propia apenas representan el 29,6% del total de la rejilla de Canal 9, lo que, paradójicamente, representa una ventaja para el sector audiovisual valenciano si se considera que RTVV paga tarde, mal o nunca según denuncias del propio sector. El 58,7 % es producción externa y un 11,7 %, coproducciones. La externalización aumenta costes, reduce la capacidad de ingresar por venta de derechos y lleva a una pérdida de control sobre contenidos que es clave para garantizar el servicio público, denuncia el sindicato.