El ministro de Fomento, José Blanco, anunció ayer en Mislata que «el corredor mediterráneo desde Algeciras hasta Cataluña se incluirá en las redes básicas» de transporte europeas. Blanco hizo este anuncio antes de someterse a las preguntas de los periodistas, consciente de los ríos de tinta que ha hecho correr el eje mediterráneo en los últimos meses. «Vamos a cumplir la reivindicación de un sueño que nos quitaron en 2003 por estrategia política y la visión trasnochada de España de que todo tenía que pasar por Madrid», aseguró el ministro en referencia, sin citarlos, a la decisión del Gobierno de José María Aznar de no defender el corredor mediterráneo como un eje prioritario con entidad propia ante la entonces comisaria de Transportes europea, Loyola de Palacio.

Al ser preguntado por qué está tan seguro de que la Comisión Europea va a declarar prioritario el eje mediterráneo y si ha recibido alguna comunicación oficial o extraoficial, Blanco aseguró que confía en «el trabajo realizado por el Gobierno de España, las 20 reuniones mantenidas por el ministerio con representantes europeos (la consellera Isabel Bonig dudaba esta semana que se hubieran producido) y en que la Comisión Europea se muestra sensible a las razones del Gobierno». El ministro también esquivó la pregunta sobre cuál eje descartaría el gobierno socialista si no pudiera financiar todos los trazados ferroviarios. «Todos los corredores de mercancías que hay que impulsar vienen precedidos de estudios de viabilidad económica» por lo que se deberá «priorizar y hacer una combinación inteligente entre lo que aporta (cada corredor) al desarrollo económico del país, la creación de empleo y las empresas más competitivas. Se dará prioridad a aquello que pueda ayudar a la dinamización de la actividad económica, pero que sea compatible con la cohesión social y territorial». Aunque acto seguido recordó que el corredor mediterráneo atraviesa un territorio que representa el «40% del PIB por eso ahora va a ser posible [que sea prioritario] para los viajeros y las mercancías, lo que no fue posible en 2003». Y también defendió que el corredor mediterráneo es el eje en el que «más se está invirtiendo en 2010 y 2011 para asegurar las obras. Sólo en 2011 se están invirtiendo 1.800 millones (en Cataluña y en los tramos a Alicante y Murcia). Ahora sí se invierte, antes no. No hay razón para dudar», respondió.

«El AVE llegó y no hubo que tirarse»

De hecho, como aval de que cumple sus compromisos, recordó que «el AVE a Valencia llegó en 2010 pese a que algunos amenazaban con tirarse desde las ventanillas del tren» (en referencia a unas declaraciones de la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá), «pues igual va a suceder con el corredor mediterráneo que logrará la inclusión en las redes transeuropeas de transportes que es un sueño deseado y anhelado por mucha gente».

Por último, el ministro también aprovechó una pregunta sobre si asistirá a la cumbre de alcaldes de Castelló para responder a los actos que promueve el PP en defensa del eje central. «Me sorprende que alguien que no tiene competencias (en transportes) haga reuniones. Si Fomento recibe la invitación, los representantes del ministerio que han asistido a las reuniones de Bruselas estarán presentes», garantizó el ministro. «Pero no me parece —continuó— ni elegante ni conveniente celebrar una reunión, opinar o decidir sobre competencias exclusivas del Gobierno como la representación de España», en este caso ante la UE. Por ello pidió que «por una foto, que no se torpedee el trabajo y la gestión realizada por el Gobierno. Vamos a vivir un momento importante y pido a las comunidades autónomas que no pongan palos en las ruedas, sino que ayuden», aseguró, en clara referencia a la campaña en defensa del corredor central realizada por los cuatro barones del PP (Cospedal, Aguirre, Rudi y Monago) para contrarrestar el apoyo del ministro al eje mediterráneo.