Una nueva comunidad, formada por una veintena de religiosos que tuvieron que abandonar su vínculo con los colegios de los escolapios de Valencia y su provincia, será bendecida por el arzobispo, monseñor Carlos Osoro, en un acto que se celebrará en la catedral el 8 de septiembre.

El arzobispo erigirá canónicamente la congregación religiosa de derecho diocesano "Cooperatores Veritatis. Pobres de la Madre de Dios" según ha sabido Levante-EMV.

Esta entidad recoge " las indicaciones emanadas de la Sagrada Congregación de Institutos de Vida Consagrada y Sociedades de Vida Apostólica" del Vaticano, señalaba ayer la página oficial del arzobispado.

Nacida en Valencia, su pretensión es dedicarse a la formación de escolares como se sobreentiende de esta misma nota en la que, textualmente, se lee: "Encomendamos al dueño de la mies esta nueva obra para que sus miembros respondan con generosidad a la llamada que han recibido y sean fermento de santidad entre los niños y jóvenes a quienes el señor los envía ". El nombre que adoptan - "Colaboradores de la verdad"- es uno de los lemas del Papa Benedicto XVI.

De hecho, esta organización está integrada por 22 religiosos que han dedicado su vida a la docencia en algunos colegios de lo que se denomina Provincia Escolapia -de los cuales cuatro están jubilados, cinco son seminaristas que aún están estudiando y el resto trabajaban en los centros educativos-, como adelantó este diario en junio pasado.

Así, se cierra un capítulo que desde hacía años estaba afectando a esta Provincia Escolapia de Valencia. La crisis se arrastraba por el discernimiento de este grupo que se había aproximado a la ortodoxia del Camino Neocatecumenal (conocido como los "kikos").

Los problemas que esta situación provocaba llevó a intervenir al Vaticano que, tras su consulta y una investigación, les obligó a elegir entre seguir las directrices de los " kikos " o la de los " escolapios " porque a ambas organizaciones católicas no podían pertenecer ya que eran "sensibilidades diferentes ".

Algunas fuentes consultadas han indicado que la intención de los miembros de la congregación -que en ningún caso es la de continuar vinculados a los escolapios - sería continuar con la labor pedagógica que han venido realizando para lo que necesitan un centro educativo que habrían solicitado al mismo arzobispado e, incluso, a la Conselleria de Educación. Ambas instituciones ni desmintieron ni confirmaron la información.