El abogado del expresidente de la Generalitat Francisco Camps apuró ayer el último cartucho para intentar que el juicio de la causa de los trajes se celebre en el Supremo en vez de en el TSJ. El cambio del tribunal supondría una nueva dilación y la garantía de que la vista oral sería después de las elecciones generales. El abogado Javier Boix realizó el alegato en una vista a puerta cerrada convocada por el TSJ para dirimir las cuestiones previas a la que también asistieron el abogado de Ricardo Costa (exsecretario general del PPCV), el fiscal y el letrado del PSPV (que ejerce la acusación popular). La vista duró más de dos horas, y Camps -que el fin de semana estaba en Japón- y Costa no acudieron.

El presidente del tribunal del jurado, Juan Climent, va a dictar en los próximos días un auto en el que resolverá sobre las cuestiones previas planteadas ayer y otro en el que fijará la fecha de juicio. Fuentes próximas al caso explicaron que la vista podría celebrarse en menos de dos meses.

El abogado de Camps ya esgrimió el argumento de que la causa debería pasar al Supremo el 12 de septiembre en el escrito de alegaciones contra el auto de apertura de juicio oral dictado por el juez José Flors. El letrado sostiene que el artículo 23.3 del Estatuto de Autonomía establece que al tribunal que le correspondería la causa sería la Sala Segunda del Tribunal Supremo.

La Fiscalía y el PSPV están convencidos de que la petición de que el caso pase al Supremo es una nueva táctica dilatoria. Las acusaciones incidieron ayer en la vista previa a la decisión del juez en que Camps presuntamente cometió el delito en Valencia. Los dos procesados que ya han sido condenados -el exvicepresidente del Consell Víctor Campos y el exjefe de gabinete de Turismo Rafael Betoret- admitieron que "las prendas y demás objetos se entregaban a sus destinatarios en Valencia, bien en sus propios domicilios, bien en la sede de Orange Market o en la vivienda de Álvaro Pérez".

Empresa de Valencia

Fuentes cercanas al procedimiento destacaron que "los trajes se cargaban a la empresa con sede en Valencia Orange Market y a cuentas bancarias que están en Valencia. El hecho de que algún traje se entregara en Madrid es irrelevante". Fuentes jurídicas precisaron que el resto de las cuestiones previas esgrimidas ayer ante el juez del TSJ Juan Climent son las mismas que ya presentaron por escrito las partes hace tres semanas.

El juez Climent dictará esta misma semana -probablemente entre hoy y mañana- el auto en el que resolverá las alegaciones planteadas por las partes. En el caso de que no acepte que el asunto vaya al Supremo, emitirá un segundo auto en que el fijará la fecha para la celebración de la vista oral con un jurado popular y concretará los hechos enjuiciables. Fuentes cercanas al caso recordaron que las peticiones de las defensas ya han sido rechazadas con anterioridad por lo que se mostraron convencidas de que el señalamiento de la vista oral "es inminente". Desde el momento en el que el juez fije el día de la vista oral, la sala del jurado tiene un mes y medio para elegir la composición de las 11 personas -nueve titulares y dos suplentes- que juzgarán a Francisco Camps y a Ricardo Costa.

Pruebas de Madrid

El abogado de Camps también ha reclamado la inclusión de testimonios y pruebas aclaratorias y exculpatorias. El letrado señaló ayer que algunas pruebas de la Fiscalía no las ha podido examinar porque provienen del procedimiento instruido en Madrid y esta situación generaría indefensión a su cliente, siempre según fuentes cercanas al caso.

El abogado del exsecretario general del PPCV y diputado en las Corts Ricardo Costa mostró en las cuestiones previas su disconformidad con la decisión de abrir juicio oral contra él. Costa es el único de los cuatro imputados que no presentó un escrito de conformidad con los hechos ante el Tribunal Superior de Justicia.

Campos, Betoret y Camps admitieron por escrito el delito el 22 de julio. El abogado del expresidente presentó al día siguiente un nuevo documento en el que rechazaba la acusación, pero el magistrado decidió mantener en la causa el primero.

Campos y Betoret insistieron en que los condenaran para no tener que ir a juicio y el TSJ les impuso hace dos semanas sendas multas de 9.600 euros. Las dos sentencias contra ellos declaran probados que obtuvieron dádivas de la trama Gürtel conscientes de que eran por su cargo.

La Fiscalía pide que Francisco Camps y Ricardo Costa sean sentenciados a pagar sendas multas de 41.250 euros por un delito de cohecho impropio.

La Fiscalía pide sumar unas corbatas de 300 ?

La Fiscalía pidió ayer sumar a la relación de dádivas unas corbatas valoradas en más de 300 euros que presuntamente recibió el expresidente Francisco Camps y que el juez Flors no incluyó.

Las corbatas son de una de las tiendas de Madrid donde la trama Gürtel adquiría las prendas. Según el fiscal, Camps recibió "en atención a su cargo de presidente de la Generalitat, al menos, regalos por un importe total de 14.021 euros".

El escrito precisa que entre finales de 2005 y septiembre de 2006, presuntamente aceptó cinco trajes y tres americanas de la tienda Milano por un importe de 5.600 euros.

Entre 2006 y 2007 percibió cinco trajes y tres pares de zapatos valorados en 5.393 euros y cuatro corbatas con un precio de 348 euros. Además, el fiscal sostiene que la trama corrupta regaló a Camps otros dos trajes, una americana y dos pares de zapatos con un coste de 2.680 euros.

En cualquier caso, tras repasar los autos y escritos de conclusiones de los jueces instructores Baltasar Garzón y José Flors, de la Fiscalía y la acusación popular resulta complicado hacer un inventario exacto del fondo de armario del expresidente y del resto de procesados en la causa. El TSJ ya ha obligado a los dos único condenados a devolver los trajes.

r. f. valencia