Consell y PSPV se enzarzaron ayer en una pugna dialéctica por los retrasos en los pagos de la ley de Dependencia en la Comunitat Valenciana.
El primero en disparar fue el conseller de Justicia y Bienestar Social, Jorge Cabré, que apuntó que el Gobierno lleva dos meses de retraso en el pago de la Dependencia en la Comunitat. Cabré aseguró que hasta el pasado 27 de septiembre el Imserso no ingresó los seis millones de euros correspondientes al pago del mes de julio en concepto del nivel mínimo de protección garantizado por el Estado para las personas dependientes de la Comunitat Valenciana, que debe abonar mensualmente. Por ello, según el conseller, la Generalitat, que ya ha abonado las prestaciones de julio y agosto, «se ve obligada a asumir el adelanto de esas cantidades que el Gobierno central adeuda para que las personas en situación de dependencia de la Comunitat puedan percibir la totalidad de sus prestaciones de manera puntual, a mes vencido».
Por su parte, el portavoz de Política Social del grupo socialista en Les Corts, Antonio Torres, exigió a Cabré que reconozca que es la Generalitat «quien no paga» las prestaciones de la Ley de Dependencia y, por ello, «las personas dependientes se mueren sin cobrar». Apuntó que «debe explicar cuántas plantas de hospitales piensa cerrar o cuántos centros de servicios sociales no están terminados».
