La Asociación de Centros de Hemodiálisis de la Comunidad Valenciana denunció ayer que la Generalitat adeuda desde 2009 casi 39 millones de euros -en concreto, 38.855.000- a las empresas que en 2002 resultaron adjudicatarias del concierto para la Prestación del Servicio de Hemodiálisis Ambulatorias. Siete de las diez empresas que en octubre de ese año firmaron el convenio con Sanidad están sufriendo con especial intensidad la crisis. La previsión es que a final de 2011 la deuda en cuestión ascienda hasta los 71.852.000 de euros. Por el momento, la entidad está pidiendo reuniones a Sanidad y Hacienda, aunque sin respuesta positiva, según fuentes consultadas.

La asociación asegura que la deuda de la Generalitat se une al descenso de tarifas del 5% que la Conselleria de Sanidad impuso el pasado 1 de enero, así como la ausencia de contabilización de facturas correspondientes a este año desde el pasado mes de mayo. "Hasta ahora las empresas podían cobrar mediante Confirming con diversas entidades financieras, pero los importes considerados como deuda y no contabilizados no pueden ser incorporados a este sistema de cobro", lamentan desde la asociación. "Hay que buscar fórmulas que permitan encontrar alguna vía de solución a la delicada situación financiera y de viabilidad de mantenimiento de los puestos de trabajo actuales y futuros en la que podían verse envueltas las clínicas a corto-medio plazo", indican.

2.000 pacientes atendidos

Según datos de la propia asociación, hoy en día 3.300 pacientes en toda la Comunitat están incluidos en el programa de hemodiálisis periódicas. De ellos, unos 2.000 son atendidos por las empresas a las que el Consell adeuda hasta la fecha casi 39 millones de euros. En ellas trabajan unos 460 profesionales "altamente cualificados". Según los pliegos de condiciones del concierto, los centros de hemodiálisis afectados aplican a los pacientes las técnicas necesarias para esta modalidad terapéutica que sustituye la función renal siempre bajo la supervisión de los servicios de nefrología de los hospitales públicos. Las empresas de la asociación reivindican su papel como gestoras, desde 2002, de los accesos vasculares, "fundamentales para el mantenimiento de este tipo de pacientes", y del transporte, convencional y sanitario mediante ambulancia, de los pacientes desde su domicilio a los centros de hemodiálisis. Asimismo, estos centros colaboran "activamente" con el mantenimiento de las listas de transplante renal de cada área sanitaria en la que actúan.