El cuerpo del joven de 29 años que había sido dado por desaparecido en Onda ha sido encontrado sin vida entre los términos de Onda y Vila-real, a varios kilómetros del lugar donde quedó su vehículo tras ser arrastrado por el agua.

La víctima, que ha sido localizada en el barranco de Ratils, pudo salir del coche en el que viajaba pero fue arrastrado por una avenida durante al menos un kilómetro, según ha deducido la Guardia Civil por el estado del cadáver.

Responsables de este cuerpo y del Centro de Emergencias de la Generalitat han informado a Efe de que el hallazgo del cuerpo ha sido posible por la actuación del helicóptero, que se ha sumado hoy al operativo de búsqueda, y por el descenso del nivel de las aguas.

El fallecido, de nacionalidad rumana, es la quinta víctima del temporal de lluvias que ha afectado con especial intensidad al norte de la Comunitat Valenciana, tras los cuatro miembros de una misma familia que perecieron el domingo al ser arrastrado por el agua el vehículo en el que viajaban en el cauce del río Seco, también en el término de Onda.

La zona en la que ha aparecido hoy el cadáver del hombre ya fue recorrida ayer por efectivos del Consorcio Provincial de Bomberos y la Guardia Civil, según las mismas fuentes.

El cuerpo se ha encontrado a unos dos kilómetros de la zona donde se localizó el vehículo del fallecido, aunque se tiene la certeza de que no fue éste el punto en el que se accidentó, sino que también fue arrastrado aguas abajo.

La Guardia Civil cree que el hombre pudo salir del vehículo, que tenía las llaves puestas y el cinturón sin enganchar, pero no llegar a la orilla, y eso explicaría las magulladuras que, según ha explicado, presenta el cadáver.

El cuerpo ha sido levantado alrededor de las 11.20 horas y, con ello, el operativo de búsqueda ha sido retirado definitivamente, según han señalado las mismas fuentes.

Los alcaldes de Onda y Vila-real, Salvador Aguilella y José Benlloch, respectivamente, han seguido las labores de rescate en las inmediaciones del barranco de Ratils.

Se trata de un cauce estrecho, de unos diez metros de profundidad, por donde discurre actualmente un caudal que no supera el metro de altura, y que se encuentra limpio, sin apenas vegetación.

Está ubicado junto a un polígono industrial, en el límite de los términos municipales de Onda y Vila-real, cerca de la autovía y junto a varias empresas cerámicas.

EL TEMPORAL CONTINÚA

La Agencia Estatal de Meteorología prevé que el temporal remita casi por completo antes del mediodía de mañana, si bien podría dejar todavía precipitaciones intensas en el sur de la provincia de Valencia y norte de la de Alicante.

Según ha explicado a EFE el jefe del servicio de Climatología de la delegación valenciana de la Aemet, José Ángel Núñez, la comarca de la Marina Alta, al noreste de Alicante, podría concentrar las precipitaciones más intensas en las próximas horas.

A diferencia de las lluvias que afectaron a Onda y Vinaroz el fin de semana, que fueron en forma torrencial, lo más significativo en las próximas horas será la persistencia de la lluvia, más que su intensidad.

Las complicaciones derivadas de la acumulación de agua y problemas en las instalaciones eléctricas han motivado la suspensión de las clases en veinte colegios de la Comunitat, nueve menos que ayer, lo cual ha afectado a un total de 8.542 alumnos.

En la provincia de Valencia se ha restablecido la normalidad en las aulas de todos los centros, a excepción del CP Ciutat de Cremona de Alaquàs, y en Alicante también han reabierto todos los centros que ayer cerraron, aunque se han suspendido las clases en los colegios de Xàbia ante las malas previsiones meteorológicas.

En la provincia de Castelló permanecen cerrados los mismos centros que ayer suspendieron sus clases en Onda, el CP Benadressa de Castellón y el CP Cardenal Tarancón de Burriana.

CORTADA LA PISTA DE SILLA

La circulación en la CV-148, que une Oropesa y Cabanes (Castellón), permanece cortada por las fuertes lluvias, así como la V-31 (conocida como la Pista de Silla) en Massanassa (Valencia), debido a la inundación de un túnel, según han informado a EFE fuentes del Centro de Gestión de Tráfico.

Las lluvias han provocado problemas de circulación en la provincia de Castellón en la CV-148 en ambos sentidos, entre los kilómetros 0 y 12, lo cual ha obligado a desviar el tráfico por la CV-10 y por la N-340.

Las precipitaciones también han cortado el tráfico en el kilómetro 10 de la V-31, a la altura de la localidad valenciana de Massanassa, en ambos sentidos.

El episodio de lluvias intensas que se registra en la Comunitat desde el pasado fin de semana no está provocando, según las mismas fuentes, más incidencias destacadas por el momento