De ellos quieren su capacidad de liderazgo y de comunicarse, su integridad y empuje, sus habilidades personales y que estén abiertos a los cambios, para lo que les piden que sean graduados en ingeniería, tengan carnet de conducir y dominen el inglés; a cambio, les ofrecen tres años de trabajo rotativo, un empleo fijo y comenzar el año próximo.

La empresa sueca del automóvil, Volvo, convocó ayer a decenas de jóvenes ingenieros y graduados en otras carreras como economía que acudieron al salón de actos de la escuela superior de Industriales en la Politècnica de València para escuchar su propuesta laboral. La industria báltica prevé producir muchos coches de su marca en los próximos años ante la demanda de los chinos por lo que se han puesto a buscar por el mundo -comenzando en el campus de Vera- a personas con futuro que atiendan a sus requisitos. Hasta 52 puestos laborales.

Sobre todo necesitan ingenieros en electricidad y electrónica aunque hay vacantes en las áreas de informática y telecomunicaciones. El director de recursos humanos del sector de graduados de esta empresa, Olle Mikkelsen, destacó ayer a Levante-EMV la "buena fama" de esta universidad en la "formación de ingenieros expertos".

El consejero del Servicio Público de Empleo Internacional de Suecia, Peter Karancsi, comentó que "se busca gente que quiera hacer una carrera de verdad. Podrán estar en un puesto fijo el 80 por ciento de los tres años y, el resto, entrenarse en todos los departamentos de Volvo".

En su opinión, lo que se buscan son "ingenieros con una alta calidad en su formación y, sobre todo, su forma de hacer las cosas. Antes los españoles tenían el problema de los idiomas pero se ha visto en esta sesión que el nivel de los jóvenes es muy bueno. Las expectativas que se les abren son grandes. Tendrán futuro, no mañana pero sí dentro de unos años. Tienen muchas oportunidades y es importante salir para luego regresar a su tierra" aseguró.

Entre los jóvenes que acudieron a la cita los había más entusiasmados y otros que veían más difícil la ocasión. Marco, ingeniero electrónico de 25 años, comentó a la salida del encuentro que "ha estado muy interesante pero las expectativas están en el aire. Es un programa a nivel mundial y los de la Politécnica estamos tan preparados como cualquier otro. Creo que no buscan tanto la formación como las capacidades personales de cada uno".

Graduada en Ingeniería y Organización Industrial y con estudios de postgrado, María de 29 años busca trabajo "donde sea" pero lo que ayer escuchó "suena bien porque no hay muchas empresas que ofrezcan un programa de graduado a largo plazo. Cualquier titulado está dispuesto a salir. Lo que buscan es que les pueda ser útil y que te guste lo que hagas" apuntó.

Para Luis, ingeniero industrial, "está complicado porque buscan a los mejores".