El decano del Colegio Notarial de la Comunitat Valenciana, César Belda, se mostró convencido de que en Valencia no entrará ninguna notaría en concurso de acreedores porque para que se pudiera acoger sería necesario que el titular «no pudiera indemnizar al personal». Belda admitió que desconoce cuándo repuntará la actividad e insistió en que los fedatarios están haciendo un esfuerzo para mantener las plantillas. El decano aseguró: «Hay compañeros que me han confesado que tienen que pasar el mes con noventa euros. Algunos lo están pasando mal de verdad. Estamos viviendo una situación muy complicada».

César Belda incidió en que los costes del mantenimiento de una notaría son altos por los salarios de la plantilla y la amortización de las oficinas, que suelen estar en las zonas más céntricas y caras.

Problemas de financiación

El decano lamentó que la crisis se ha agravado por la caída de la demanda inmobiliaria, la sobredimensión de la Administración española y la situación financiera de la banca. El representante de los notarios advirtió de que los precios de las viviendas han caído entre un 25 y un 30% desde que se inició la crisis hace cuatro años. Además, lamentó que la demanda no se reactiva a pesar de que se pueden encontrar buenas ofertas porque los bancos no conceden créditos.

Entre enero y agosto de 2007 se constituyeron 76.654 hipotecas en la Comunitat Valenciana y en el mismo periodo de este año solo se han firmado 20.587. A pesar de todo, el representante de los notarios valencianos subrayó que el mercado inmobiliario comienza a recuperarse en zonas costeras como Torrevieja o Benidorm por la demanda extranjera. «Ahora es el mejor momento para que los alemanes e ingleses compren este tipo de viviendas porque el año que viene van a subir», aventuró.