La Federación de Servicios Públicos de la UGT en la Comunitat Valenciana envió ayer un correo electrónico a todos los empleados de la Generalitat en el que les avisa de que el próximo presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, tiene previsto ordenar una nueva bajada de sueldo a los funcionarios, en concreto, de un 10%.

El sindicato asegura en su misiva que el líder del PP nacional comunicó su decisión a los máximos dirigentes sindicales a nivel nacional en la reunión que mantuvieron hace unos días en Génova, sede del PP. "El futuro presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en la reuniones preliminares que ha mantenido con los secretarios generales de UGT y CCOO, Cándido Méndez y Ignacio F. Toxo, les ha anunciado que en los consejos de ministros previstos celebrar el 23 y el 30 de diciembre, entre las medidas que se pretende adoptar figura la reducción del 10% de las retribuciones de los empleados públicos". De esta manera comienza la carta que con el membrete oficial de la UGT llegó a lo largo de ayer al correo electrónico de los empleados de la Generalitat.

El sindicato recuerda que la medida tendrá carácter básico y será de aplicación a todas las administraciones públicas del Estado español, es decir, autonomías, ayuntamientos, diputaciones e incluso determinadas empresas públicas. Además, revelan que Rajoy informó a los dirigentes sindicales de que habría una una nueva congelación salarial.

El sindicato anima a los empleados públicos a sumarse a las movilizaciones que ya están en marcha en protesta por los recortes en el gasto social. "Desde la FSP-UGT, además de rechazar contundentemente las citadas medidas os pedimos que participéis activamente en las concentraciones de los almuerzos que van a seguir produciéndose", indican. Añaden que si el recorte salarial "se concreta" el sindicato se pondrá de acuerdo con otras organizaciones iniciar "movilizaciones de carácter más contundente".

Fuentes de la FSP-UGT consultadas por este diario mantuvieron que Rajoy ha trasladado al líder del sindicato su intención de dar un nuevo tijeretazo a los salarios públicos. Cabe recordar que en mayo de 2010, el presidente del Gobierno (ahora en funciones), José Luis Rodríguez Zapatero, anunció un recorte general de un 5 % del sueldo de los funcionarios, además de la congelación de las pensiones en 2011. Las medidas causaron un gran revuelo y desembocaron en una huelga general. El PP criticó el plan de recortes, aunque hace unos días la número dos del PP y presidenta de la Castilla-La Mancha anunció su propio recorte a los funcionarios de su comunidad a través de una rebaja de los complementos específicos, lo único que pueden tocar los gobiernos autonómicos. El resto del salario es decisión de la Administración estatal.

"Las nóminas, garantizadas"

Por otro lado, ayer en un acto público, el presidente de la Diputación de Valencia, Alfonso Rus, aseguró que los funcionarios de la diputación no tendrán ningún problema en cobrar. "Las nóminas están garantizadas", aseguró el jefe de la institución provincial.