Un informe del Consell muestra que la financiación de la enseñanza en los centros privados concertados sostenidos con fondos a cargo de los presupuestos de la Generalitat es muy similar, incluso menos costosa, que la de los públicos en la Comunitat Valenciana —en términos numéricos que no sociales—.

En concreto, la gestión del funcionamiento, en un curso completo, de un instituto de Secundaria de 12 unidades de la ESO y 6 de Bachillerato es de 2.369.507 euros mientras que el coste de un concierto con las mismas aulas es de 1.883.660: unos 553.847 euros menos.

Este estudio figura en la memoria económica de la propuesta de incorporación a la Ley de medidas fiscales de la Generalitat para 2012, dentro de la justificación para poner en marcha la construcción de Centros de Iniciativa Social (CIS).

Sin embargo, el secretario de Enseñanza de CC OO, Miguel Ángel Vera, matiza estos datos al explicar que «en la enseñanza concertada hay menos número de profesores por igual número de aulas y grupos que en la pública, por lo que se ahorran en plantilla. Los docentes de la pública tienen 18 horas lectivas semanales y los de la concertada dan 25 horas. Pese a haberse conseguido la homologación retributiva entre ambos sectores, ésta no se cumple en cuanto al horario» lamentó.

Sería ese menor número de profesores el que provocaría que la financiación sea menor.

A estas cantidades por funcionamiento se suman las correspondientes a construcción: 6.163.800 en un centro de las mismas unidades y otros 394.245 euros por equipamiento. Dependiendo de las unidades y de si es Secundaria o Primaria, las cantidades aumentan o disminuyen.

Según el último estudio comparativo de la enseñanza concertada en España, de 2008, la Comunitat Valenciana destina 623 millones de euros a este sector, la cuarta tras Cataluña, Madrid y Andalucía.

También hay diferencias entre lo que cuestan los estudiantes dependiendo del sistema elegido. Según datos de la conselleria y del Ministerio de Educación de ese año, la enseñanza de un estudiante que cursa en la concertada supone 3.054 euros mientras que en la pública se duplica, con 6.466. En opinión de este departamento autonómico, los alumnos de la enseñanza concertada suponen un ahorro para esta comunidad de 696 millones de euros.

Sabido es que el conseller de Educación, José Ciscar, considera que existe «un desequilibrio muy importante en la Comunidad Valenciana entre centros públicos y centros concertados», como ha declarado en varias ocasiones, ya que los segundos representan solo un 32 % por ciento del conjunto del sistema educativo valenciano.

Educación se vale de estos datos para justificar su intención de ceder suelo público a la empresa privada para que construya colegios concertados conocidos como Centros de Iniciativa Social.