Los titulares de los colegios privados concertados de la Comunitat Valenciana fueron conscientes de que, definitivamente, ayer no iban a cobrar los gastos de funcionamiento, unos 22 millones de euros que el Consell les adeuda desde julio, cuando a las 15 horas no habían recibido las comunicaciones pertinentes prese a las promesas. Unos días antes, tuvieron el primer aviso de que esto iba a ocurrir con el retraso en el abono de las pagas extras del profesorado de esta enseñanza subvencionada, que debían de haber estado ingresadas el pasado 23 de diciembre.

En una extraña mañana de viernes a un día de concluir 2011, y muy pendientes del banco, el anuncio de cambio de máximo responsable en la Conselleria de Educación, de José Ciscar a María José Català, tampoco fue un buen síntoma. El ahora vicepresidente había garantizado diez días antes, en una reunión, a los presidentes de las tres patronales del sector concertado que les pagaría antes del 31 de diciembre una parte de la deuda por gastos de funcionamiento -que también incluyen los salarios del personal de administración y servicios-.

"Todos los trámites están realizados. Se está pendiente de la disponibilidad para proceder al pago", señalaron ayer a Levante-EMV fuentes oficiales de Educación, que confirmaron que Hacienda todavía no había dado orden de transferir ninguna cantidad por este concepto, por lo que "se confía" en que la próxima semana o dentro de dos "como muy tarde" se proceda a saldar esta deuda.

En cambio, los profesores tanto de la enseñanza pública como de la concertada, incluidos los de las cooperativas, sí cobraron, en el último momento de la mañana de ayer, sus nóminas y pagas extras. Sin embargo, los directores de los centros públicos, al estar de vacaciones, desconocían si habían recibido la partida correspondiente por gastos de funcionamiento, que se ingresa en estas fechas.

Por su parte, las farmacias de la Comunitat Valenciana, en sus tres colegios profesionales, recibieron ayer la comunicación de que se había efectuado la orden de transferencia, realizada desde el Gobierno central -según explicaron-, para cobrar los 60 millones del segundo de los tres pagos acordados, correspondiente a la deuda del Consell por la primera quincena de agosto pasado.

No obstante, esta cantidad en concepto por el pago del coste de los medicamentos adelantados por las farmacias, no estará disponible hasta el lunes en los bancos. Desde el Colegio Oficial de Valencia indicaron que confían en que esté hecha la transferencia.

Menos alentados estaban en la patronal de colegios católicos. Su presidenta, Vicenta Rodríguez, indicó que "queremos creer que la próxima semana llegará el dinero para gastos de funcionamiento, pero hay centros muy angustiados y algunos han tenido que solicitar créditos con su patrimonio personal como aval para hacer frente. El día 9 de enero garantizamos que abriremos los colegios pero ¿y el 10?" se preguntó.

Los libreros adoptarán medidas de presión

Los libreros valencianos adoptarán medidas de presión después de que la Generalitat no haya hecho efectivo el pago de una parte de los 31 millones de euros de deuda que mantiene por los bonolibros.

Hace quince días, Educación se comprometió con los libreros a pagar una parte "importante" del importe de la deuda entre los días 26 y 29 de diciembre, y el resto se abonaría antes del 15 de febrero, según recordó ayer la presidenta del Gremio de Libreros de Valencia, Gloria Mañas. El incumplimiento del compromiso supone, en su opinión, "la última estocada", "algo imperdonable" ya que librerías y papelerías han tenido que asumir el coste de los libros escolares en un año de bajada de consumo para el comercio.

Fuentes de Educación indicaron que estos pagos son una prioridad y se harán efectivos en el menor plazo de tiempo posible, aunque no han podido concretar si será este año o los primeros días de la próxima semana

Según Mañas, la falta de pago puede provocar la desaparición de muchos establecimientos y la reducción de personal.