FGV ha hecho público el índice de fraude en la red de metro y tranvía de Metrovalencia en 2011. El 3,18% de los viajeros lo hacen de forma fraudulenta sin haber comprado el billete o con un billete de otra zona. Sin embargo, esta cifra, como es evidente, se refiere al índice detectado y deja por contabilizar todos esos viajeros que, aprovechando apeaderos o estaciones en superficie en las que el acceso al andén es libre, hacen uso del transporte público sin pagar.

El dato es bueno si se compara con el de 2007 ó 2008, cuando el índice de impagos detectados alcanzó el 8,05% y el 9,87% respectivamente. Por líneas, el mayor porcentaje de fraude del pasado año se situó en las que tienen tramos en superficie, como las de Tranvía 4 y 6, con un 5%, o la Línea 1 que circula desde Villanueva de Castelló hasta Bétera y Llíria con la mitad de sus paradas en superficie y un 4,14% de fraude detectado. En las líneas 3 y 5, prácticamente subterráneas en todas sus estaciones, el índice es mucho menor del 1,39%. Contra esto, en 2011 se llevaron a cabo 520.400 inspecciones, frente a las 446.474 del año anterior.

La lucha contra una práctica demasiado extendida

Cualquiera que utilice con frecuencia este transporte público -especialmente en superficie- sabe que muchos de sus usuarios no cancelan el billete. Un vistazo a las paradas de tranvía desvela que la mayoría de los que esperan en el andén a coger su convoy no pasan por la máquina canceladora. Muchos de ellos tienen a buen seguro billetes mensuales, especialmente los universitarios, pero gran parte de los usuarios de tranvía tiene por mala costumbre no abonar este servicio público.

En 2009, cuando el número de personas pilladas alcanzaba el 7,42%, FGV decidió lanzar una campaña para luchar contra la práctica habitual de subir al metro sin pagar. La empresa de transportes impulsó entonces medidas como la promoción de tarjetas mensuales y títulos de larga duración, mediante tarifas de bajo coste y concertadas, especialmente a través de convenios con entidades públicas y asociaciones. En sesenta días -presume FGV- se redujo el fraude en medio punto y desde entonces ha bajado al 4,62% de 2010 y al 3.18% del último ejercicio en 2011. Sin embargo, de nuevo, se trata de cifras que ponen de manifiesto sólo el fraude detectado.