Los cincuenta primeros pasajeros españoles del crucero italiano "Costa Concordia" que regresaron ayer a España anunciaron su intención de presentar una denuncia conjunta contra la compañía. Así, lo aseguraron la su llegada al Aeropuerto de El Prat procedentes de Roma en un vuelo de Alitalia.

Los pasajeros, la mayoría catalanes, se reunieron de forma improvisada en el aeropuerto, tanto en Barcelona como en Roma, y han comenzado a confeccionar una lista de afectados. A la espera de reunir a todos los afectados, recopilan nombres, DNI y teléfono.

En declaraciones a los medios que les esperaban a su llegada a Barcelona, criticaron que la evacuación del barco fue "muy lenta" y que algunos de ellos tuvieron que tirarse al agua para salvar la vida al ver que la embarcación se volcaba. Una de las afectadas, Purificación Balbás, de Santander, relató que ella y su marido subieron en el penúltimo bote salvavidas y afirmó que "la tripulación no sabía manipularlos y bajarlos al agua, hubo gente que se tiró al mar, otros se colgaron de las lámparas" y cuando pudieron salir del barco, estaba bastante hundido.

Otra de las afectadas, la catalana María José Blanco señaló sobre la denuncia, que "si hubo una negligencia, alguien tiene que cargar con su culpa". Además agradeció la respuesta de los habitantes de la isla italiana en la que fueron acogidos en primera instancia donde les atendieron "como pudieron, con mantas, comida, también abrieron la iglesia".

Por su parte, la organización Facua-Consumidores en Acción recomendó a los ciudadanos afectados por el naufragio del crucero, entre los que se encuentran 177 españoles, que reclamen las correspondientes indemnizaciones a las agencias de viajes con las que lo contrataron.

Según la entidad, los pasajeros tienen derecho a recuperar las cantidades abonadas por el crucero y el transporte, así como todos los gastos ocasionados como consecuencia del accidente, como la comida, alojamiento o bienes de primera necesidad que hayan tenido que adquirir, más una indemnización por sus equipajes perdidos.