El presidente de la Diputación de Valencia y del PP provincial, Alfonso Rus, incendió ayer la reunión de partido convocada por el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, para explicar las medidas de recorte con una polémica intervención en la que cuestionó abiertamente al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. "Hemos pasado de ser los mejores, a ser las escoria. No lo podemos permitir".

Así de contundente, según varios de los presentes, se mostró Rus, quien tomó la palabra tras la intervención de Fabra ante la reunión de Junta Directiva Regional del PPCV, para reprochar a la dirección nacional del partido que no salga en defensa de la Comunitat Valenciana. Rus subió a la tribuna con papeles en la mano para reproducir las declaraciones del presidente de Galicia, Alberto Nuñez Feijóo, en las que justificó sus medidas de austeridad para "no acabar" como la Comunitat Valenciana. El barón provincial instó a la dirección nacional a corregir al presidente gallego y salir en defensa de la gestión del Consell.

En este contexto recordó la contribución del PPCV a la victoria de Rajoy, al que la organización valenciana "sacó de las tinieblas". "Hemos aportado el 12% de los votos y no se nos puede a tratar como si fuéramos Guinea Ecuatorial", soltó Rus, según varios de los presentes a la reunión, que se celebró a puerta cerrada con la asistencia de la mayor del PPCV. En el mismo tono crítico, el presidente de la diputación de Valencia se quejó de la ausencia de ministros valencianos en el Gobierno y en el segundo escalón -precisó que García-Margallo no era valenciano- e insistió en que pese a la contribución a la victoria de Rajoy el PPCV no es nadie en Madrid.

Aunque Rus inició su intervención defendiendo al presidente Alberto Fabra y ofreciéndole el apoyo de la organización provincial, sus palabras evidencian la brecha que parece haberse abierto entre el nuevo PP de Alberto Fabra y la dirección provincia. El discurso de Rus despertó todo tipo de cometarios una vez terminado un encuentro que acabó con aplausos al presidente de la Generalitat. Aunque en el entorno de Alberto Fabra se respiró con cierto alivio porque las críticas de Rus no habían ido dirigidas al presidente, se apuntó que el barón provincial se ha generado un problema con Rajoy. De cara al congreso nacional, que se celebrará en Sevilla en febrero, no parece una buena idea ponerse en el disparadero, sobre todo habida cuenta de que tras la cita de Madrid se renovarán las direcciones regionales y provinciales. Rus ya se puso en el punto de mira de Génova cuando dijo aquello de que el PPCV le dio a Rajoy "la peseta para el duro".

Rus recibió in situ un correctivo en boca de Carlos Fabra. El expresidente de la diputación de Castelló dejó claro su desacuerdo y defendió la libertad del presidente del Gobierno a elegir a sus ministros al margen de la cuota territorial. El también presidente del PP de Castelló defendió al que fue su pupilo, el jefe del Consell e instó al partido a estar unidos en torno a su liderazgo.

Barberá, callada y molesta

Quien no abrió la boca fue la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, quien en su día también se quejó del supuesto ninguneo a la C. Valenciana y una de las dirigentes que junto a Rus más se ha desmarcado del liderazgo de Fabra. Barberá permaneció callada, aunque saltó por una alusión del diputado José Marí, quien recordó los tiempos en que se abucheaba a miembros del partido, entre ellos a Barberá, por la guerra de Iraq. A la alcaldesa no le gustó que su nombre saliera a colación y reprochó al diputado el cometario. "Estoy aquí callada y no tengo ganas de hablar", vino a decir visiblemente molesta según varios de los asistentes.