El portavoz de Compromís, Enric Morera, siguió ayer con su cruzada contra el uso del sector público empresarial como pesebre en el que colocar a "15.000 enchufados". Invitó reiteradamente al presidente Fabra a elaborar una lista en la que se concrete "cuántos, quiénes son, a qué se dedican y cuál es su productividad".

Morera considera que es ahí y no en los funcionarios o interinos donde está "el agujero negro de la Generalitat". Despedir a todos esos "enchufados" es parte de la receta de Compromís como alternativa a los recortes en educación o sanidad o a los sueldos de los empleados públicos. Como ejemplo de "enchufada en el sector público" citó a la hermana del golfista Sergio García. Y de paso reprochó al presidente que le haya dado a este deportista de élite o al corredor de rallyes Miguel Ángel Fuster, "lo que se le deba al Parque Alcosa".

Desde Esquerra Unida, tanto la portavoz, Marga Sanz, como el diputado Juan Ignacio Blanco exigieron la dimisión del conseller de Hacienda, José Manuel Vela. "Hay responsables directos de la quiebra fiscal de la Generalitat: Vela y todo su equipo", explicó Sanz. Blanco recordó que en los últimos 12 años, Vela ha sido el encargado de confeccionar el presupuesto autonómico, el responsable de la "política derrochadora" y de unos presupuestos "que se han dedicado a maquillar", añadió. Al bajar de la tribuna, se acercó al conseller, sentado en el banco azul, y le entregó una carta de dimisión ya redactada, invitándole a que pusiera la firma.

El portavoz popular, Rafael Blasco, achacó al Gobierno socialista la "responsabilidad en exclusiva" de haber puesto "el país al borde del abismo". Blasco recriminó a los grupos de la oposición que no avalaran las medidas urgentes puestas en marcha por el Consell y recordó que, por contra, el PP sí estuvo al lado del Ejecutivo de Zapatero cuando se reformó la Constitución para poder fijar tope al déficit público.