Centenares de pasajeros se quedaron ayer sin tren debido a la avalancha que se dirigía a la manifestación en Valencia por la educación pública. Durante la tarde del sábado, los manifestantes de las afueras de la capital se encontraron con muchas complicaciones las líneas ferroviarias C2 y C6. «Desde las 14h ya estaban todas las estaciones llenas de gente», explica Isabel Rovira.

A lo largo de la tarde, en municipios como Algemesí, Silla o Catarroja, los usuarios no pudieron subir al tren dirección Valencia-Nord. Lourdes Pastor, profesora del Instituto Vicent Gandia apunta que «desde Alzira las personas ya no podían acceder a los vagones», todos estaban completamente llenos. En su caso, Lourdes tuvo suerte, ya que Pobla Llarga es una de las primeras paradas en el recorrido Xàtiva-Valencia.

A pesar de que los trenes de cercanías tienen capacidad entre 800 y 900 pasajeros, todas las plazas estaban repletas. En esta ocasión, ya desde sus primeras estaciones la capacidad estaba al completo. Ante la falta de previsión, muchos pasajeros reclamaron el importe de sus billetes. Esto ocurrió en Benifaió donde los viajeros buscaron medios alternativos para llegar a la manifestación.

No obstante, la Ribera Alta no fue la única zona afectada. En la línea C6, la estación de Sagunt estaba completamente colapsada y muchos no llegaron ni a comprar el billete. Fuentes de Renfe han declarado al Levante-EMV que «únicamente se incrementa la oferta en la semana fallera». No obstante, debido a la gran demanda, se duplicó «la capacidad de los trenes a partir de las 20 horas», momento en el que todos sus asistentes volvían a sus casas.