Mide tres metros de largo y el volumen que ocupa es de un metro cúbico. Su aspecto exterior recuerda al de una pequeña orca, de ahí que tome el nombre de la "ballena asesina". Así es el "Orca 300", el minisubmarino espía que ha desarrollado el Instituto de Diseño y Fabricación (IDF) de la Universitat Politécnica de Valencia (UPV)y que esta mañana será presentado en sociedad. El vehículo autónomo sumergible de inspección subacuática, manejado a distancia desde un buque de apoyo por un control multitáctil, ha sido diseñado "para misiones de análisis de las aguas oceánicas, pero también de vigilancia tanto en el ámbito civil como militar", informaron fuentes de la UPV.

La fabricación de "Orca 300", que se ha desarrollado en seis meses, es totalmente valenciana. El diseño del prototipo se hizo en el Campus de Vera y se ha construido con fibra de vidrio mediante un proceso de infusión de resinas en Talleres Xuquer SL, una empresa de Carcaixent con gran experiencia en la fabricación con materiales composites para el sector náutico.

La creación del minisubmarino se enmarca dentro del proyecto Diseño de un Vehículo de Inspección Submarina Autónoma para Misiones Oceanográficas (Divisamos), coordinado por el director del IDF, el catedrático Josep Tornero, Catedrático. Este proyecto, que arrancó en 2010 y en el que en su primera fase participó la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT), ha sido financiado por el Plan Nacional de Ciencia y Tecnología con 428.340 euros, de los cuales la UPV ha recibido 306.130.

El fin último de "Divisamos" es, según la web del IDF, "diseñar y construir, un prototipo de vehículo submarino en base a la experimentación obtenida de un minisubmarino cedido por la Armada Española, el "Pluto Plus", y con la experiencia de ingenieros de la empresa pública Navantia

En la primera fase se llevó a cabo el diseño de la estructura de sensorización y control remoto para dotar de autonomía a vehículos submarinos y se equipó con ella al sumergible de la Armada. Así mismo, se desarrollaron aplicaciones de autolocalización en línea mediante georeferenciación de mapas de sonar con la cartografía a bordo del buque nodriza. También se crearon interfaces para la manipulación gráfica de los datos basadas en pantallas multitáctiles, haciendo un uso extensivo de información multimedia (videos y mapas) para el análisis pormenorizado de las misiones y su posterior evaluación.

En la segunda fase, ya el IDF en solitario, diseño el prototipo de minisubmarino, estudiando su maniobrabilidad, accesibilidad estabilidad, y resistencia fluidodinámica mediante herramientas estándar CAD, siglas inglesas del diseño asistido por ordenador.

El paso siguiente que acometieron los investigadores de la UPV fue construir un prototipo de bajo coste basado en materiales compuestos que se presenta hoy.