El equipo de gobierno del PP del Puig llevará a pleno un moción para condenar la agresión que sufrieron el pasado domingo dos periodistas de Levante-EMV mientras cubrían la trencà de perols con motivo del día de Sant Pere. Así lo señaló el alcalde de la localidad José Miguel Tolosa, quien ayer mantuvo una reunión con el director de este periódico Ferran Belda, en la que el regidor le trasladó su pesar por lo ocurrido y que hizo extensible a toda la redacción.

Tolosa -quien asegura que llegó a la plaza cuando ya se había producido el ataque- también destacó que desde que el domingo acudió al cuartel de la Guardia Civil en el que Marga Ferrer y Laura Garsando denunciaron lo sucedido, ha estado en "contacto permanente" con las periodistas para interesarse por su situación.

La intención del edil es que la corporación del Puig condene tanto el ataque a la redactora y a la fotógrafa de Levante-EMV, como el hecho de que la celebración de Sant Pere Nolasc haya quedado empañada por la actuación de los vecinos que rodearon, insultaron y golpearon a las periodistas cuando estas trataban de informar sobre la costumbre de lanzar ratas durante las cucañas.

Este anuncio se realiza después de que el mundo político, profesional y cultural valenciano condenase la agresión y exigiese una investigación sobre lo sucedido. Entre las personas que condenaron los hechos estaba la delegada de Gobierno Paula Sánchez de León, la alcaldesa de Valencia Rita Barberá y el portavoz del Grupo Socialista Joan Calabuig, la coordinadora de EU Marga Sanz o el Consell Valencià de Cultura, además de las asociaciones y colegios periodísticos valencianos.

El equipo de gobierno del Puig se reunió el lunes con carácter de urgencia como consecuencia de los incidentes y para expresar su "firme rechazo al acto violento producido en el último acto de las Fiestas". A través de un comunicado que remitió el ayuntamiento, el alcalde quiso "mostrar su rechazo ante la reacción de unos pocos asistentes, que han empañado el buen juego del resto, en una fiesta tradicional de más de 300 años de historia, donde todos los vecinos de nuestro pueblo acogen siempre con respeto, tolerancia y compañerismo". "La acción violenta de unos pocos entorpece el buen trabajo realizado por los festeros", concluyó el regidor.