"La Pepa" tiene raíces valencianas. Y no solo por haber nacido el día de San José de 1812. Valencia tiene el dudoso honor de ser la ciudad donde Fernando VII abolió la primera constitución nacida en unas Cortes democráticas en toda Europa. Pero no solo por eso. Su propia redacción también tiene ADN valenciano, algo que se analiza esta tarde en el seminario "El papel de los valencianos en la Constitución de Cádiz", organizado por el "Forum Persones i Societat Valenciana" que dirige José Morgan.

En torno a dos decenas de diputados valencianos participaron en los debates constituyuntes y, a decir verdad, el perfil de aquellos pioneros no difiere en mucho del de los actuales representantes valencianos en Madrid. Según el análisis comparativo realizado por el politólogo Simón Alegre, la gran diferencia estriba, precisamente, en que a principios del XIX existía un mayor equiplibrio numérico entre representantes conservadores y liberales, "con 7 diputados que van quedando encuadrados en cada facción".

"Algo que se contrapone al actual reparto ideológico, con mayoría conservadora de casi dos tercios, quedando el resto en manos del PSOE y con una representación residual para UPyD, EU y Compromís, en el marco de un sistema de partidos no homologable al de 1812", explica.

En cuanto a las profesiones de los diputados valencianos en Cádiz, casi la mitad eran hombres de leyes, aunque también destaca la representación de los estamentos propios del Antiguo Régimen (militares, nobles y religiosos), existiendo un pequeño porcentaje dedicado a las profesiones liberales. Casi comoa ahora, donde se mantiene una relevante presencia de gentes relacionadas con el mundo del Derecho, casi un tercio. Y apunta Alegre: "El vestigio de la sociedad estamental ha sido sustituido por el de los políticos de carrera, que han alternado cargos institucionales durante años y suelen contar con una titulación universitaria que apenas ha sido ejercida a nivel profesional". Las profesiones liberales tienen un peso cercano a la tercera parte de la representación, "logro de las constituciones burguesas en las que se engloba La Pepa".

En lo relativo al origen demográfico, en 1812 el peso de la provincia de Valencia es avasallador, con tres cuartas partes del total. De esta demarcación, una mitad era del Cap i Casal y el resto de las comarcas centrales, perteneciendo a localidades como Alberic, Xàtiva, Oliva, Bocairent y Aielo de Malferit. Las provincias de Alicante y Castelló acaparaban el resto de la representación, proviniendo los diputados de ciudades como Alcoi, Novelda, Sant Joan d´Alacant, Oriola y Almoradí y Xilxes, Vinaròs, Planes, Peñíscola y Canet lo Roig, respectivamente.

En la actualidad, se guarda cierta correlación con el mencionado reparto de escaños en función de la magnitud del distrito. La circunscripción de Valencia absorbe la mitad de los mismos y Alicante y Castelló la restante. La diferencia más notable, lógicamente, se da en el sexo de los representantes, ya que en 1812 la presencia de valencianas brilla por su ausencia al ser la política una actividad vetada para ellas.

Los más activos en el debate sobre los señoríos

Los diputados valencianos fueron los cuartos más activos en las Cortes de Cádiz, por detrás de asturianos, extremeños y catalanes. Según se desprende del análisis del politólogo Simón Alegre, los valencianos más participativos en los debates fueron Borull (referente de la facción conservadora valenciana), José Martínez, Villafañe y Villanueva, especialmente este último, 4º diputado de la cámara en número de intervenciones. Otros hablaron muy poco o incluso no llegaron a participar, como ocurre también en el actual hemiciclo. Los problemas que afectaban a Valencia, como los señorías, fueron los que más participación autóctona generaron. En lo referente a las temáticas abordadas, los diputados valencianos hicieron aportaciones a las cuestiones que más dominaban: Aparici y Lloret en el debate sobre los señoríos, Samper en temas militares, Villafañe y Sombiela en los jurídicos y Villanueva en materia religiosa. Por otra parte, Borrull y José Martínez hablaron en la práctica totalidad de las discusiones.