La decisión de la Ministerio de Fomento de presentar a Bruselas un nuevo diseño del mapa ferroviario español, que amplía los kilómetros planificados sin aclarar cómo piensan financiarlos, provocó ayer un terremoto en Cataluña y un aplauso con sordina en la Comunitat, cuando no el silencio. En Cataluña la reacción a favor del eje mediterráneo fue unánime. Diferentes estamentos institucionales, políticos y económicos reclamaron ayer al Gobierno de Mariano Rajoy que sitúe como "prioritario" el Corredor ferroviario Mediterráneo, por delante del Corredor Central.

El conseller de Territorio, Lluís Recoder, aseguró en el Parlament que el corredor central es una obra que "no tiene pies ni cabeza" porque es "incoherente" con las políticas de austeridad. Para el gobierno catalán, esta obra "faraónica" tiene un coste imposible de asumir tanto para el Ejecutivo español como para la propia Unión Europea (UE) que, ha recordado, ya "descartó" la construcción de esta infraestructura. Desde su cuenta personal en Twitter, el portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran Lleida, explicó que ayer mismo habló con la ministra Pastor para señalarle que "hay que dar prioridad al corredor mediterráneo".

"Es hora de dar prioridad y no de quedar bien con todos", subraya Duran, quien el martes habló con Pastor y la ministra no le dijo "nada" respecto del corredor central. Incluso desde el PP de Cataluña se lanzó un mensaje en favor de dar "prioridad" al corredor Mediterráneo: así se lo planteó ya la presidenta del PPC, Alícia Sánchez-Camacho, a la ministra y así se lo hará saber asimismo al propio Mariano Rajoy en los próximos días. Por su parte, el presidente del grupo parlamentario del PSC, Joaquim Nadal, acusó al Govern de Cataluña de reaccionar con tibieza al anuncio de Pastor. Nadal, que ve esta obra como una "utopía insostenible", censuró el intento del PP de "querer contentar a todos los territorios" al plantear esta infraestructura, algo que, a su entender, es una concesión "injustificable" en plena crisis. Desde ERC, Oriol Amorós denuncia que "el corredor Central es un auténtico delirio nacionalista en momentos de duros ajustes presupuestarios. Madrid nos ha tomado el pelo, y de qué manera".

Castelló pide un compromiso firme

En la Comunitat Valenciana el más contundente fue el alcalde de Castelló, Alfonso Bataller. "No entenderíamos desde Castelló que se haga un túnel en Huesca sin acabar el corredor mediterráneo, por lo que es importante que el Ministerio de Fomento se comprometa de forma firme en la construcción de estas dos infraestructuras importantes", manifestó el alcalde de la capital de la Plana, quien aseguró haber solicitado una entrevista con la ministra para conocer de primera mano la situación del eje ferroviario. La consellera de Infraestructuras, Isabel Bonig, intentó ser conciliadora y evitar la polémica. "Desde la Comunitat Valenciana no vamos a competir con otros corredores ferroviarios, sino que defendemos el nuestro", si bien considera "prioritario" el corredor mediterráneo". La consellera recordó que la propia ministra, Ana Pastor, aseguró que la incorporación del corredor central a la propuesta de la red básica transeuropea "no merma ni un ápice el compromiso del ministerio con el corredor mediterráneo".

Desde el mundo empresarial, sólo el presidente de Pro-AVE, Federico Félix, y el secretario de Ferrmed, Joan Amorós, aseguraron que "en momentos de crisis hay que invertir en infraestructuras productivas y con retorno. Y esos requisitos los cumple a la perfección el corredor mediterráneo", aseguraron. "No tengo ninguna duda de que el eje mediterráneo es el que debe hacerse y ser prioritario por encima de todos, pero sin menospreciar al resto".