?La trama Nóos intentó presuntamente colar informes falsos por valor de más de un millón de euros a la Generalitat justificando que eran necesarios para que Valencia fuera el escenario de los juegos del Mediterráneo, un proyecto deportivo que jamás llegó a celebrarse. Isabel Villalonga, la exsubdirectora de Presidencia de la Generalitat, ha facilitado una lista de las facturas que fueron rechazadas y que correspondían a estudios o informes que entendió que no justificaban ni su necesidad, y mucho menos su alto precio. La Generalitat presidida por Francisco Camps y el instituto que encabezaba el duque de Palma firmaron un convenio para intentar conseguir la organización de los juegos del Mediterráneo. El gobierno dedicó una partida de seis millones de euros para este proyecto dado el interés que existía para que este evento deportivo se celebrara en Valencia. El convenio que firmaron ambas partes, que está en poder de los investigadores, establecía que solo se abonarían las facturas al instituto Nóos una vez que la administración hubiera comprobado que el trabajo se había realizado.

El pasado jueves el Grupo de Delincuencia Económica de la Policía y el fiscal Anticorrupción Pedro Horrach tomaron declaración como imputada a la antigua subdirectora general de Presidencia, Isabel Villalonga. Es la cuarta imputada valenciana en el caso, tras Jorge Vela, José Manuel Aguilar y Elisa Maldonado, todos ellos responsables de Cacsa.

Villalonga era la encargada de controlar el cumplimiento de dicho convenio. Villalonga confirmó a los investigadores que a través de su departamento se habían abonado a las empresas tuteladas por el duque de Palma un total de 380.000 euros, a pesar de que no se llegó a conseguir la organización de este evento. Sin embargo, Villalonga señaló también que la trama Nóos presentó al cobro otras facturas, por valor de cerca de un millón de euros, que ella misma rechazó porque se dio cuenta que se intentaban cobrar trabajos que no se habían entregado a la administración. La trama Nóos utilizó todas las empresas que controlaba para emitir dichas facturas. Entre las sociedades se incluye a Aizoon, que el duque de Palma comparte con su esposa la infanta Cristina.

La mayoría de dichas facturas no cobradas correspondían a informes que, aparentemente, carecían de interés alguno y se referían a temas deportivos. Aunque la subdirectora general se negó a pagar estos gastos y devolvió las facturas a las empresas de la trama Nóos, ella misma se preocupó de anotar el concepto de cada uno de estos documentos que le intentaron colar sin éxito. A pesar del tiempo transcurrido aún guardaba entre sus documentos este listado, que entregó a la Policía para que se comprobaran los datos. No obstante, en su declaración a la Policía y al fiscal también explicó a la que otros "expedientes administrativos se perdieron durante una mudanza", según fuentes de la investigación.

Villalonga es actualmente secretaria general de la Delegación del Gobierno. La delegada, Paula Sánchez de León, respondió ayer respecto a si piensa destituirla tras ser imputada: "Desde luego que voy a mantenerla, por supuesto, porque no hay ninguna imputación. Hay una imputación policial para que pueda asistir y defenderse de la mejor forma posible, y nada más. Yo confío en la profesionalidad, en la labor, en la honestidad y la integridad de esta persona absolutamente, sin ningún tipo de matiz".

La Policía también registró la sede de la empresa valenciana Looby Comunicación. Se trata de una firma que facturó 240.000 euros al instituto Nóos, que a su vez cobró este dinero a la Generalitat. Se trataba de una factura por unos informes que no tienen el mayor interés y se camuflan en la organización de los juegos del Mediterráneo. Todos ellos se han elaborado con datos copiados de internet. El más significativo es un estudio en el que se explica en qué consiste el deporte del fútbol y de qué forma se juega. Estos informes no fueron localizados en los archivos de la Generalitat, pero sí aparecieron en la oficina de la empresa de comunicación.