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La validez de algunos grados potenciados por la reforma del Plan Bolonia y su adaptación al Espacio Europeo de Educación Superior están siendo cuestionadas en los juzgados.

Uno a uno hasta en trece centros académicos, los tribunales superior de justicia (TSJ) de las distintas comunidades autónomas -esta misma semana se ha conocido la sentencia correspondiente al de la Comunitat Valenciana- han dejado en suspensión cautelar la denominación -no el contenido- del "Graduado en Ingeniería de la Edificación", mientras que el Constitucional ha denegado el amparo a las escuelas que lo imparten.

También, las escuelas superiores de enseñanzas artísticas hace quince días recibieron el mazazo del tribunal Supremo anulando su capacidad de impartir grados por lo que únicamente podrán expedir títulos superiores. Miles de alumnos están afectados en todos estos casos.

Tras el recurso del Consejo General de Colegios Oficiales de Ingenieros Industriales, el TSJ-CV acaba de decidir la suspensión cautelar de la denominación del Graduado en Ingeniería de la Edificación -los antiguos arquitectos técnicos o aparejadores-. El auto recoge una sentencia anterior del Supremo en los mismos términos.

El director de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería de la Edificación de la Universitat Politècnica de València, Rafael Sánchez Grandía, insistió ayer a Levante-EMV que la suspensión cautelar "se refiere solo a la denominación, está limitado al nombre" aunque se trata de la suspensión cautelar de la publicación del plan d estudios aprobado por parte de la politécnicas de València. "Ahora vamos a presentar un recurso de súplica" añadió.

El responsable de este centro, que ayer se reunió con los representantes de los estudiantes aseguró que el título "es válido académicamente, oficial y habilita para ejercer la profesión de arquitecto técnico".

En su opinión, "es todo un absurdo porque ahora la Universidad puede certificar la validez como título de grado oficial con ese nombre, con la coletilla de que la denominación está sometida la suspensión cautelar".

Para el director de Ingeniería de la Educación se trata de "una intromisión de los colegios oficiales en ámbito académico por intereses profesionales. Hemos pedido a la Conferencia de Rectores de España que solicite al Ministerio de Educación que aclare quién tiene competencias para definir la denominación de los títulos. Nosotros seguiremos ejerciendo toda la acción de defensa prevista para nuestro grado" apuntó Sánchez Grandía.

Por su parte, el portavoz de la Plataforma de Ingenierías Técnicas valencianas aseguró ayer que la profesión entrará en "shock" si no se contempla otra homologación para los títulos. La organización ha iniciado una ronda de encuentros institucionales que contempla al Gobierno, universidades, formaciones políticas y agentes sociales porque llevan Años con un porcentaje de desempleo inaudito en la Ingeniería Técnica valenciana, previsto en un 20 por ciento del total, indicaron.