­El Gobierno ha decidido dar marcha atrás y mantendrá activo el plan contra inundaciones en el rio Júcar, al menos en lo que se refiere a la presa de Sellent, cuyo proyecto constructivo fue paralizado «sine die» poco después de que Miguel Arias Cañete asumiera la dirección del ministerio de Agricultura y Medio Ambiente.

El Boletín Oficial del Estado publico ayer las «nuevas fechas de apertura» de las ofertas técnicas y económicas de la licitación para redactar el proyecto de construcción de la presa de Sellent.

La resolución se publica prácticamente con el formato propio de una corrección de errores, modificando fecha y despacho de apertura en relación a la primera publicación—14 de diciembre de 2011— e ignorando que el pasado 13 de febrero, el ministerio que dirige Arias Cañete pospuso sin fecha el acto de apertura de plicas.

La decisión fue muy criticada desde la filas de la oposición debido a la importancia y enorme carga simbólica de esta obra, incluida dentro del Plan Global frente a inundaciones en la Ribera del Júcar aprobado en el año 2000.

Entre los críticos de esta decisión destacó el diputado autonómico socialista Francesc Signes, que emplazó al presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, a exigir a Mariano Rajoy la continuidad del plan

En opinión de este diputado, el aplazamiento de la licitación del proyecto constructivo de la presa sobre el río Sellent constituía un hecho «gravísimo» e «irresponsable» que pone en peligro las vidas y los bienes de los habitantes de la Ribera.

Se trata de un proyecto «vital» para evitar las inundaciones de la Ribera y el nuevo gobierno «no debe paralizarlo», manifestó Signes. Además de sacar a licitación la redacción del proyecto constructivo, fase previa a las obras, por un importe de 1,1 millones de euros, Signes recordó que el Gobierno socialista adjudicó al Centro de Estudios y Experimentación de Obras Públicas (Cedex) los ensayos del modelo hidráulico reducido de las presas de Sellent y Canyoles, valorados en 3,5 millones de euros.

El resto de actuaciones estructurales incluidas en el citado plan son la construcción de las tres presas situadas en los ríos Magro, Sellent y Canyoles, la actuación integral en el cauce del río entre Carcaixent y la AP7 y la mejora del drenaje de la marjal sur del Júcar.

Según la resolución publicada en el BOE, la apertura de plicas se producirá el próximo 10 de mayo a las 10 horas.

El proyecto técnico está por definir, aunque los últimos informes aconsejaban la construcción de una presa de escollera con núcleo arcilloso—similar a la de Tous— y con aliviadero lateral en un túnel perforado en su margen izquierda. La presa tendría una longitud en coronación de 158 metros de altura, con 10, 50 metros de ancho y una altura máxima sobre cimientos de 70 metros.