El director general para España y Portugal de Air Berlin, Álvaro Middelmann, se sumó ayer a las críticas del presidente de Ryanair, Michael O'Leary -con el que no comparte ninguna otra afinidad-, sobre la configuración de la nueva terminal del aeropuerto del Altet, que llegó a calificar como obra faraónica y "nueva catedral", como también definió a los nuevos aeródromos de Málaga, Vigo, A Coruña o la T-4 del aeropuerto de Barajas.

Middelmann lanzó los dardos durante la presentación de los nuevos vuelos de la compañía en El Altet para la presente temporada alta (abril-octubre), donde vertió una catarata de críticas a la, según sus palabras, pésima política de Aena en la remodelación de los nuevos aeropuertos españoles, como el de Manises, ejecutada sin contar con las compañías aéreas, los clientes de las instalaciones, según denunció.

En este sentido, ayer el Tribunal de Cuentas reclamó a Aena que el futuro prime las inversiones con una mayor rentabilidad coste-beneficio, a la vista de las pérdidas de 510 millones de euros registradas por la empresa pública en los ejercicios 2009-2010. También censuró con vehemencia la subida de las tasas aeroportuarias que entrarán en vigor en verano y que, según el director de Air Berlin, amenazan con "acabar con la gallina de los huevos de oro", el turismo, sumándose así a las quejas lanzadas por la patronal hotelera.

El ejecutivo de la segunda aerolínea alemana advirtió, en este sentido, de que "dos euros por billete son muchos euros" (sobrecoste calculado por Aena para los billetes de avión), teniendo en cuenta, además, el que los aeropuertos turísticos pelean con destinos más baratos del Mediterráneo. Middelmann puso como ejemplo el hecho de que la compañía aérea Condor acaba de anunciar una rebaja de 50 euros en sus vuelos entre Alemania y Grecia. El director general de Air Berlin alertó, por otro lado, de que "si a las noticias negativas que se producen últimamente en España dentro del mundo financiero añadimos, ahora, el encarecimiento de las tasas estaremos haciendo lo posible para que la gente se lo piense dos veces a la hora de decidir si viene".

Para el ejecutivo de la aerolínea germana, el Gobierno "dispara con pólvora de rey" con las tasas y, según Middelmann, trata de trasladar a las aerolíneas las pérdidas de actuaciones discutibles como las ampliaciones del Altet. "En ningún caso se ha calculado el coste de mantenimiento de las nuevas terminales. Metros cúbicos para aburrir que tienen un alto coste energético, que ahora se trata de pagar con las tasas".