­El curso de 2012-2013 para los 9.193 alumnos de música de los 62 centros educativos valencianos sin ánimo de lucro está en el aire. Los centros de música de las sociedades musicales y los conservatorios municipales donde se imparten los grados Elemental y Profesional no cobran. Y las cantidades que les adeuda la Conselleria de Educación suman más de 3,4 millones de euros. La Federación de Centros de Música Autorizados y Conservatorios de la C. Valenciana (Fecemac-CV) esperaba una respuesta a su propuesta de financiación trasladada a los responsables de la Conselleria de Educación antes de las vacaciones, con un recorte de los presupuestos anual del 10% en lugar de los brutales recortes del 54%, 55% y 34% en 2010, 2011 y 2012 que pretende la administración. La contestación no ha llegado y en apenas un mes los centros de música autorizados como tales tendrán que programar el próximo curso, sin saber si cobrarán antes de junio o, directamente, no percibirán un euro. Los problemas económicos salpican a todas las comarcas.

LA RIBERA

Sobrevivir con la mitad

En la Ribera la situación llega a ser enormemente crítica para varios centros que mantienen la incertidumbre al no saber si podrán abrir sus puertas el curso próximo. Es el caso del Centre d´Estudis Musicals de Benifaió , del Vicent Vera de Sueca y del CPM Santa Cecilia de Cullera. La comarca tiene a casi cuatro mil músicos en sus sociedades, entre los 2.463 de la Ribera Alta y los 1.386 de la Baixa, además de más de 1.500 alumnos en sus centros de educación mu sical. Además de los recortes del Consell, se están produciendo graves impagos que, por ejemplo, a la academia de Benifaió le afecta desde 2009. La mayoría de los centros han visto reducidos sus ingresos a una tercera parte, como el conservatorio municipal de Carlet (el único de la comarca) que ha pasado de percibir 145.313 euros en 2009 a 57.966 en 2011. En total, los centros ribereños recibieron en 2011 368.603 euros menos que en 2009, prácticamente la mitad.

«La situación es muy compleja por lo que hemos tenido que despedir a la celadora, a una persona de administración y al pianista acompañante. Los profesores tienen el sueldo congelado desde 2009 y la entidad tiene el pago de la seguridad social aplazado al no poder hacerle frente», explica la directora del centro de estudios benifaionense, Nadia Sturm, quien subraya que el problema, más que los recortes, son los retrasos en los pagos e incluso el desconocimiento de los plazos de liquidez que posibilitarían poder programar los próximos cursos.

El centro Santa Cecilia de Cullera ha subsistido este año por los fondos sociales de la entidad, utilizando exactamente 30.000 euros, mientras los profesores y directores se autoasignaron una fuerte reducción en sus honorarios. Además, varios consistorios han salido al rescate de sus centros de estudios, conocedores de la importancia dinamizadora de estas entidades en la cultura valenciana. Es el caso de Alginet , l´Alcúdia, Almussafes y Carlet. En el último caso, el equipo de gobierno dirigido por Mª Ángeles Crespo ha llegado a asumir casi 90.000 euros reducidos en subvenciones por parte de la Conselleria en los últimos tres años al conservatorio Perfecto García Chornet. Informa Carles Senso.

LA COSTERA-LA CANAL-LA VALL

Subidas de tasas o desaparición

La Generalitat aún no ha abonado al Ayuntamiento de Chella la subvención de 2011 y adeuda 51.547 euros, un importe que supone el 40% de la financiación del centro musical. El alcalde, Pablo Seguí, califica de «insostenible» la situación y lamenta que la corporación ha tenido que redoblar sus esfuerzos, aumentando su aportación para evitar despidos o rebajas en el sueldo de los docentes, dos posibilidades que Seguí descarta y contempla como «la última opción». Además, el consistorio aún no sabe cuál será la aportación autonómica de 2012. «Normalmente las ayudas salían en noviembre, pero ahora sólo nos dan largas».

Subir las tasas es la única opción para afrontar los impagos, tanto en el conservatorio de Chella como en el de Albaida, cuyo consistorio -prácticamente en bancarrota- ha decidido retirar su aportación anual al centro y dejar que se autogestione, únicamente con el dinero de las matriculaciones que pagan los alumnos. La administración local ha reducido el salario de los profesores, también de la escuela de música municipal, con el objetivo de que «el coste final del servicio sea cero». «Con las ayudas de la Generalitat ya ni contamos, porque nunca llegan», comentó no hace mucho a Levante-EMV el alcalde de Albaida, Josep Albert.

En Xàtiva, las tasas del conservatorio se incrementaron un 40% en 2010 y este año ha desaparecido de los presupuestos de la Generalitat un aporte específico de 200.000 euros que el gobierno autonómico venía inyectando cada año al consistorio para su mantenimiento. En una reciente junta de gobierno, el ejecutivo solicitó a la administración autonómica la necesidad de contar con una ayuda económica extra en 2010 para garantizar la supervivencia del conservatorio de música. Informa S. Gómez.

EL CAMP DE MORVEDRE

Problemas en la Lira Saguntina

Especialmente crítica es la situación de la centenaria Sociedad Lira Saguntina, que es la única de la comarca que no ha recibido aún la subvención correspondiente a 2010. Algunas bandas también padecen una situación delicada hasta llegar a peligrar, si no reciben las subvenciones, las nóminas y el trabajo de parte del profesorado.

El presidente de la Lira, Paco Yanes, ha confirmado que la Lira Saguntina está en una situación alarmante. «Tres escuelas se han quedado sin cobrar 2010 y una de ellas es la nuestra. No tienen control ninguno, van pagando conforme cogen papeles. Existe una discriminación total porque si nosotros somos los únicos de la comarca que aún no hemos cobrado esa ayuda se produce una clara línea divisoria que nos perjudica claramente. Incluso nos hemos planteado cubrir el 100% de los gastos con las cuotas de los alumnos» señalaba. La sociedad hace malabares para poder pagar las nóminas de sus profesores y ya ha tenido que suprimir aspectos tan básicos como el agua para beber o la limpieza. «Hemos tenido que quitar el agua, si alguien necesita se la tiene que traer de casa. Además, hemos tenido que prescindir de la empresa de limpieza porque no nos la podemos permitir. Ahora limpiamos como podemos» añade.

Respecto a las bandas, Fina Gómez, presidenta de bandas de El Camp de Morvedre ha declarado que «la situación es mala, las subvenciones de 2011 no llegan. Tienen hasta junio para pagar, así que esperamos que lleguen. Si no las recibimos, las nóminas corren peligro y nos veremos obligados a prescindir de profesorado». Gómez ha recordado que el pasado año la ayuda se ingresó en enero. Asimismo, también ha declarado que no se puede subir más la matrícula del alumnado y que al final esta situación repercutirá muy negativamente en la calidad de la banda, porque habrá menos alumnos y menos profesores, teniendo que impartir una misma persona diferentes instrumentos.

Otras escuelas de música, no obstante, respiran más sosegadamente. Este es el caso de la Unión Musical Porteña, que asegura estar pendiente del cobro de las subvenciones, pero añade que «no debemos nada a nadie. Nos hemos preocupado en mantener un capital social suficiente como para pagar a los profesores y poder acabar el año sin recibir ayudas» explica su presidente, Lorenzo Peláez. El impago de Conselleria asciende, en este caso, a casi 27.000 euros y corresponde al ejercicio del año 2011. La Escuela Musical de Faura se encuentra en la misma situación. Aunque no ha cobrado la ayuda correspondiente a 2011, desde la dirección se afirma que la situación económica, por ahora, le permite «no estar a la espera de nada». Informa Txema Campos Pérez.

CASTELLÓ

Ajustes y recortes en programas

En Vila-real la situación se repite. Los recortes se notan pero, por ahora, no afectan a la plantilla. «Hace dos años empezamos a tomar medidas porque veíamos que algo pasaba. Aumentamos los ratios de alumnos por clase y, pedimos a alumnos y profesores que se concienciarán en pequeños gestos como apagar la luz al salir del baño para ahorrar lo que se pueda», explican los responsables del conservatorio Mestre Goterris. En cuanto al número de alumnos, la cifra ha descendido pero no demasiado.

En Segorbe, su alcalde Rafael Calvo, reconoce que el conservatorio supone un déficit al consistorio de 70.000 a 100.000 euros «en algo que ni siquiera le correspondería por no tratarse de una competencia municipal». Una cantidad importante que, debido a los continuos recortes del Consell en las subvenciones, han hecho que desde el ayuntamiento se continúe trabajando para que Conselleria se haga cargo del funcionamiento del mismo «como se comprometió cuando se puso en marcha».

El presidente de la Unión Instructivo Musical La Esmeralda de Almassora reunió a los alumnos a principios de año para comunicarles el estado de las cuentas de la institución y anunciar un recorte en la programación si persistía la deuda de la Conselleria de Cultura y el ayuntamiento. El máximo responsable de la formación, Enrique Moliner, indicó a los músicos que la presencia de la banda en los actos que se celebren en el municipio está garantizada, pero no en aquellos que supongan el traslado de componentes e instrumentos a otros municipios.

La crisis ha puesto contra las cuerdas al conservatorio municipal Mestre Feliu de Benicarló que tiene un 40% del alumnado de la comarca. El consistorio ha intentado reducir asignaturas por la falta de ayuda autonómica pero el AMPA lo ha evitado con una recogida de firmas. La Escola de Música Ciutat de Benicarló sufrió un recorte del 40% de ayudas hace dos años lo que se tradujo en un incremento de las tasas y una reducción del salario de los profesores. La escuela de música «Ciutat de Peñíscola» también sufre los retrasos en los pagos de la Generalitat. Informan J. Maura, Sara Fructuoso, Noemí Oms y Ana Monleón.