El vicepresidente y portavoz del Consell, José Císcar, confirmó ayer que el nuevo mapa de grados universitarios entrará en vigor en el curso 2013-2014 e irá en la línea de "agrupar aquellas titulaciones universitarias que no tienen demanda" y de estudiar la posibilidad de impartir "solo en una universidad pública" las carreras que tengan "muy poca respuesta" en estas instituciones, tal como había adelantado Levante-EMV el pasado 3 de abril.

En la línea de la austeridad y los recortes, la Conselleria de Educación trabaja en la elaboración de ese nuevo mapa de titulaciones universitarias para "racionalizar el sistema", afirmó Císcar ayer en una entrevista en Canal 9. El portavoz argumentó que van a "racionalizar todo el mapa universitario para ahorrar", aunque garantizó que lo harán "sin dejar a nadie sin estudiar lo que quiere estudiar".

Además de agrupar titulaciones sin demanda, estudian otras medidas como que "una titulación que tenga muy poca respuesta en cada una o en algunas de esas cinco universidades públicas", en vez de impartirse "en todas las universidades publicas o en parte de ellas, a lo mejor sólo se da en una universidad pública para agruparlos a todos".

Preguntado por la posibilidad de extender al ámbito educativo un modelo parecido al sanitario -que incorpora la gestión privada en los hospitales de la Comunitat Valenciana-, el también conseller fue tajante: "No, en absoluto. En educación están tomándose otro tipo de medidas, pero en educación no se plantea ese sistema. Vamos servicio a servicio".

En su opinión, "podríamos decir que lo que ahora se implanta en la sanidad ya existe desde hace muchos años en la educación" puesto que "esa colaboración público-privada que ahora se busca más en el sistema sanitario ya existe a través de los colegios concertados", en los que se presta "un servicio publico esencial como la enseñanza a través de empresas privadas, en un régimen de concierto".

Sobre la subida de las tasas universitarias, destacó que el aumento en un 20 por ciento aprobado por el Consell para la primera matrícula se sitúa "en medio" de la horquilla fijada por el Gobierno y va acompañada de "una política de becas sin precedentes en la que se va a multiplicar por ocho la cantidad" que se destina a estas ayudas, al pasar de dos a 16,5 millones en el próximo curso.

"Lo que no queremos es que ningún alumno se quede sin estudiar por falta de recursos", recalcó Císcar, quien señaló que la Comunitat está "en la media española de lo que pagan de matricula los alumnos", que aportaban un 15 % de los "entre 6.000 y 7.000 euros" que cuesta cada curso en función de cada titulación, y ahora aportarán el 20 por ciento, y el resto se financia vía impuestos. "Se trata de que en vez de pagar el 15 % paguen el 20 % y que aquellos que no puedan llegar ni siquiera al 20 %, por el sistema de becas puedan estudiar teniendo la matricula gratuita", resumió.

Además, aludió al incremento del 35 % que se plantea en la segunda matricula, del 75 % en la tercera y del cien por cien en la cuarta matricula y, en este sentido, reivindicó que "hay que premiar la cultura del esfuerzo. Aquel que trabaja y que cumple de una manera más importante, que pague menos", afirmó.