Copago. Externalización de servicios. Planes de ajuste. Tres conceptos que en los últimos tiempos han copado el debate sobre el modelo público sanitario en la Comunitat Valenciana, que en 2013 acogerá la entrada de empresas del sector privado para la gestión de servicios no asistenciales.

En un contexto difícil, muchos son los ciudadanos que defienden que la sanidad —junto a la educación— debería salvarse de los recortes. Sin embargo, las mismas voces temen que el tijeretazo aún no se ha acabado.

Uno de los colectivos más damnificados por la situación es el de los profesionales sanitarios, que en los últimos tiempos han visto como sus nóminas eran 'podadas', a la vez que se desprendía de profesionales. Entre ellos, las enfermeras han sido uno de los grupos más combativos, protagonizando varias acciones de protesta. Según los datos manejados por el sector, en la C. Valenciana trabajan un total de 24.000 enfermeras. Más de la mitad está en paro o sobrevive a través de contratos intermitentes.

Las percepciones del sector cuentan con el aval de las cifras oficiales. Así, el documento 'Informe sobre profesionales de cuidados de enfermería. Oferta-Necesidad 2010-2025', confeccionado por el Ministerio de Sanidad, sitúa a la valenciana como la quinta autonomía con menor ratio de enfermeras por habitante, situado en 345 por cada 100.000 residentes. La cifra equivale a tres profesionales sanitarias por cada 1.000 personas.

Cataluña (227), Andalucía (268), Baleares (328) y Madrid (332) presentan peores números. En el lado contrario descansan la comunidad foral de Navarra (483), el País Vasco (478) o La Rioja (469). La media nacional se sitúa en torno a las 336 profesionales cada 100.000 habitantes, por lo que el dato valenciano es ligeramente superior.

Firmas contra los recortes

Las cifras aportadas en el estudio confeccionado por el Ministerio de Sanidad ilustran por sí solas la situación que viven los profesionales. Y cobraron ayer mayor vigencia, al celebrarse el Día Internacional de la Enfermería.

Dentro de una iniciativa desarrollada a nivel nacional, el sindicato Satse-Valencia coordinó ayer una mesa informativa en la calle Xàtiva. A su vez, comenzaron una recogida de firmas contra los recortes en Sanidad implementados por el Consell y el Gobierno. La intención es presentar las rúbricas a la ministra de Sanidad, Ana Mato, el próximo 26 de mayo en una multitudinaria concentración convocada ante la sede del ministerio en Madrid.

María Luz Gascó, secretaria de organización de Satse en la C. Valenciana, atendió a Levante-EMV y comentó que "la cifra ideal es contar con una enfermera cada seis pacientes y los datos avalan que estamos muy lejos. Si no se dota de profesionales adecuados, el sistema de salud pública se resiente y el que acaba pagando es el ciudadano". Cuestionada sobre la entrada de firmas privadas en la gestión de hospitales, la portavoz sindical expuso que "nosotros siempre hemos defendido la gestión pública de la sanidad. El conseller Rosado nos ha dicho una y otra vez que solo se privatizarán los servicios no asistenciales, pero nos tememos que se trate de una puerta abierta para el resto del sistema sanitario".