Con el incendio estabilizado y todavía sin apagar, y miles y miles de hectáreas arrasadas por el fuego tan solo tres días después de que se originasen las primeras llamas en los términos de los seis municipios del Alto Palancia (Bejís, Sacañet, Teresa, Viver, Jérica y Altura) varios alcaldes de estas poblaciones palantinas han querido mostrar su "indignación" por la falta de coordinación y organización de los equipos de extinción.

Así lo han denunciado públicamente los alcaldes de Jérica, Amadeo Edo, del que se han visto arrasadas alrededor de 4.500 hectáreas; y de Teresa, Ernesto Pérez; que ha perdido tres cuartas partes de su término municipal; han calificado de desastre total la coordinación y la falta de medios aéreos a la hora de cubrir todos los frentes que se han originado en la comarca.

Edo ha calificado de auténtica vergüenza la situación que se dio durante estos días para prevenir que el fuego pasase hasta el término municipal de Jérica: "La tarde del domingo fue absolutamente crítica para la población y hasta las 13 horas, no vimos aparecer ningún bombero en Jérica", denunciaba el alcalde que tachaba de impotencia absoluta el ver cómo "se está perdiendo un patrimonio medioambiental enorme y no se hace nada para evitarlo".

Así pues, el munícipe jericano ha apuntado que Jérica ha perdido alrededor de 4.500 hectáreas de las zonas de Benaval y de la Muela en los dos focos que, aunque bastante sofocados, todavía permanecen activos. Para Edo "el principal problema es que no hay medios y por tanto, tampoco hay nada que coordinar".

Por su parte el munícipe de Teresa, Ernesto Pérez, ha hablado de la total "descoordinación de medios durante el proceso de extinción" y matiza que "cuando teníamos el fuego encima del pueblo, el sábado por la tarde, los efectivos nos abandonaron y fuimos la gente del pueblo la que tuvimos que evitar una catástrofe mayor".